Polinomios

MEMORIAS DE MIS PUTAS TRISTES

Francisco Uribe 12211059

GARCÍA MARQUEZ, Gabriel (2004). Memorias de mis putas tristes. Bogotá: Editorial Norma, S.A.

Memorias de mis putas tristes es una novela narrada en primera persona por un señor el cual esta cumpliendo 90 años. Aunque desconocemos su nombre sabemos que es un hombre común y corriente y es escritor. El día de su cumpleaños decide comunicarse con la dueña de un burdel, llamada Rosa Cabarcas a la cual le pide que le consiga una niña, virgen, ya que él quiere celebrar su cumpleaños número 90 en las faldas de una joven virgen. Rosa Cabarcas logra conseguirle a la joven. La ansiedad consume a este anciano el cual ignora el hecho de que su vida está a punto de cambiar.

Leyendo esta novela de García el lector podrá encontrar unas características muy interesantes que puede lograr cautivar a una gran mayoría. Memorias de mis putas tristes esta narrada en primera persona y es muy interesante ya que García nunca nos revela el nombre de este sujeto en las primeras 30 paginas manteniéndolo en secreto. Del mismo modo desconocemos exactamente donde vive lo que hace del narrador una persona desconocida para los lectores. Este estilo hace que la novela tenga un toque de realismo mágico donde los lectores podemos hacer uso de nuestra imaginación para armarnos nuestras propias historias. Aunque es un tema bien controversial el tratado en esta novela (la prostitución), como ciudadanos no podemos ignorar que si existe y es parte de nuestra sociedad.

Cierta vez cuando tenía 14 años andaba caminando por las calles de Las Vegas, en Estados Unidos, cuando se acerca a mi un joven, mexicano creo yo, y me entrega una tarjeta. Al mirar la tarjeta me doy cuenta que es una foto de una mujer muy linda, con poca ropa, anunciando un burdel. Este fue el primer acercamiento que tuve con ese mundo de la prostitución. Fue interesante por que al principio se me hacia un poco difícil entender que una mujer se vendiera por el dinero. Sin embargo poco después me entere que era legal en mi país, situación que me sorprendió mucho. Una vez le hice una entrevista a una prostituta para el periódico de mi colegio y aprendí a respetar a esas mujeres que muchas veces no tienen como sostenerse.

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