Osteogenesis

L

a osteogénesis se refiere al proceso de formación y desarrollo de hueso nuevo. Un material osteogénico es el hueso autólogo que está formado por tejido implicado en el crecimiento y reparación ósea.

Los osteoblastos que son células óseas primarias que se encuentran rodeadas de la sustancia fundamental. Posteriormente una serie de sustancias proteicas y minerales son incorporadas a la célula la que se va transformando en osteocitos o célula ósea madura. Constantemente el hueso está en permanente formación y renovación, esta última función es de reabsorción y le corresponde a los osteoclastos.

Es la creación de hueso nuevo a cargo de las células competentes, en este caso los osteoblastos, cuya fuente son los injertos óseos autólogos.

Osificación es el proceso de creación de nuevo material óseo por las células llamadas osteoblastos.

Es sinónimo de formación de tejido óseo. Hay dos procesos para formar tejido óseo normal:

1 La osificación intramembranosa es la formación directa de hueso en el tejido conjuntivo primitivo (mesénquima)

2 La osificación Endocondral involucra cartílago como precursor.

En una fractura que se cura, la osteogénesis Endocondral es el proceso más frecuente, como por ejemplo en fracturas de huesos largos tratadas con yeso, mientras que en las fracturas tratadas con reducción abierta y estabilización con placas y tornillos metálicos puede haber osteogénesis intramembranosa.

Los mecanismos exactos por los que se desencadena el desarrollo del hueso aún no están claros, pero está de cierta forma relacionado con factores de crecimiento y cito quinas.

La osteogénesis puede realizarse:

 Por depósito de calcio sobre fibras de colágeno. Este tipo es el denominado osteogénesis membranosa. Huesos membranosos son el frontal, temporales, occipital y parietales.

 Por sustitución de cartílago de crecimiento por células óseas, que provocan el depósito de fosfato y carbonato cálcico. Este mecanismo de crecimiento se conoce como osteogénesis Endocondral.

CONDENSACIÓN MESENQUIMÁTICA

El tejido mesenquimático se condensa (adquiere mayor celularidad) en los centros de osificación primarios (áreas en las que se inicia la génesis ósea).

Las células osteogénicas derivan de las mesenquimatosas y conservan sus prolongaciones citoplasmáticas y uniones a células adyacentes. Todos los huesos cuentan con varios centros de osificación primarios.

Los osteoblastos se rodean de una matriz mineralizada y se forman entonces las espículas de hueso primario. Los vasos sanguíneos se desarrollan entre las espículas. Las espículas siguen creciendo y más tarde se fusionan para constituir una estructura esponjosa con vasos sanguíneos en los intersticios. El mesénquima remanente, ubicado entre el hueso y los vasos sanguíneos da origen a la médula ósea.

El mesénquima adyacente a los centros de osificación primarios se condensa aún más y se diferencia en osteoblastos, agregando hueso a la superficie por aposición.

Por último, todos los centros de osificación primarios, se fusionan.

El tejido mesenquimático se condensa (adquiere mayor celularidad) en los centros de osificación primarios (áreas en las que se inicia la génesis ósea).

Células osteoprogenitoras u osteógenas.

• Provienen del mesénquima en el embrión.

• Poseen una forma de huso.

• Muestran retículo endoplásmico rugoso escaso, así como, Aparato de Golgi poco desarrollado pero se encuentran ribosomas libres en abundancia.

• En el adulto, se encuentran en la capa celular interna del periostio y del endostio.

• Su diferenciación depende de las condiciones del medio: Si la tensión parcial de oxígeno es alta, se diferenciarán en osteoblastos; si la tensión parcial de oxígeno es baja, se desarrollarán células condrógenas.

E

s la formación directa de hueso primario en el mesé quima o el tejido conectivo osteogénico. Es responsable del desarrollo de la mayoría de los huesos planos del cráneo y la mandíbula y del crecimiento y reparación por aposición.

Cuando al tejido mesenquimático le disminuye la irrigación codificación. Cuando al mesenquimático le aumenta la irrigación osificación.

La directa puede ser membranosa (mesenquimática) o periostal. La membranosa empieza por células mesenquimática productoras de matriz osteoide que luego la calcifican.

La membranosa se observa en la calota y parte del maxilar inferior. Consiste en una transformación directa del tejido fibroso en tejido óseo: así se forma tejido óseo esponjoso central (díploe) delimitado por tejido óseo denso en las superficies (tablas).

* Las células osteogénicas: derivan de las mesenquimatosas y conservan sus prolongaciones citoplasmáticas y uniones a células adyacentes. Todos los huesos cuentan con varios centros de osificación primarios.

* Osteoblastos: las células osteogénicas de los centros de osificación se diferencian en osteoblastos.

* Material osteoide: los osteoblastos secretan primero sustancias fundamental y colágeno. Esta matriz orgánica, en la que las fibras colágenas se disponen al azar, se denomina material osteoide.

Después se liberan los gránulos de la matriz, que contienen fosfatasa alcalina y fosfato de calcio. La fosfatasa alcalina permite la precipitación de sales minerales, mientras que el fosfato de calcio se deposita sobre las fibrillas colágenas.

*Espículas: los osteoblastos se rodean de una matriz mineralizada y se forman entonces las espículas de hueso primario. Las vasos sanguíneos se desarrollan entre las espículas.

* Crecimiento: las espículas siguen creciendo y más tarde se fusionan para constituir una estructura esponjosa con vasos sanguíneos en los intersticios. El mesénquima remanente, ubicado entre el hueso y los vasos sanguíneos da origen a la médula ósea.

* Expansión: el mesénquima adyacente a los centros de osificación primarios se condensa aún más y se diferencia en osteoblastos, agregando hueso a la superficie por aposición.

* Fusión: por último, todos los centros de osificación primarios, se fusionan.

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