Traumatismo Craneo Encefalico

El traumatismo cráneo encefálico, una visión a la rehabilitación

Romina Jaqueline Riquelme Córdova

Resumen: El traumatismo cráneo encefálico es el principal responsable de las discapacidades y deficiencias cognitivas. Las secuelas interfieren en la calidad de vida de los pacientes con este tipo de daño. Es por esto que la neurociencia y la medicina buscan recompensar la independencia de los pacientes. En los inicios de la rehabilitación se creía que no se podía realizar un eficiente tratamiento, por la limitación de la regeneración del cerebro, sin embargo con el transcurso de los años y la tecnología, se evidenció la capacidad para recobrarse. En el siguiente artículo se detallará la capacidad de la rehabilitación como una herramienta terapéutica eficiente en sujetos con edad adulta y con daños adquiridos graves, se examinará a un paciente de veinticuatro años el cual tuvo un seguimiento de un año. Se comprobará la capacidad de la terapia, realizada después de la etapa aguda, la fase más sensible del daño adquirido.

Palabras claves: Alteraciones cognitivas, Calidad de vida, Compensación, Rehabilitación, Trauma craneoencefálico.

Introducción

En el siguiente artículo se expondrá un tema complejo para la salud pública. El traumatismo cerebral y su rehabilitación es uno de los conceptos más controversiales en cuanto a tratamiento en pacientes con este tipo de lesión. Para comenzar, el TCE es una afectación del cerebro causado por una fuerza externa que puede producir una disminución o disfunción del nivel de conciencia y que conlleva una alteración de las habilidades cognitivas, físicas y/o emocionales del individuo.

(Luque, 2000) expresó “El (TCE) es una patología frecuente en los países industrializados, constituyendo una de las principales causas de muerte entre la población pediátrica y adulta joven” EE.UU, en tan solo un año, ocurren 10 millones de casos, de los que el 20% llevan asociados lesiones cerebrales, aproximadamente 50.000 personas mueren de traumatismo cerebral. (Orient López, Sevilla Hernández, Guevara Espinosa, Terré Boliart, Ramón Rona, & Bernabeu Guitart, 2004), en un análisis estadístico en España agregaron, “Cada año se producen en nuestro país entre 80.000 y 100.000 nuevos casos de TCE (incidencia de 150-250/100.000habitantes/año), de los cuales más de 2.500 quedarán con importantes secuelas”. Esto es basado en historias clínicas o defunciones, no existe un verdadero consenso sobre la definición y la clasificación de los grados de gravedad en los estudios y bases de datos, en este país.

El TCE es la primera causa de muerte en la población de 20 a 40 años en Chile, y es motivo importante también de secuelas neurológicas en pacientes de edad productiva y el 40% de los accidentes de tránsito son fatales (otro 40% son los poli traumatizados) en nuestro país. De los accidentes reportados por la población (MINSAL, 2001), Encuesta nacional de calidad de vida.

Los daños producidos por el TCE, en la mayoría de los sobrevivientes producen discapacidades cognoscitivas, conducta y comunicación. Todas estas provocan una dificultad o falta total de los procesos cognitivos o físicos en el sujeto.

Las discapacidades resultantes dependen de la gravedad de la lesión, edad y salud general del paciente. Dentro de días o semanas de ocurrida la lesión, se debe realizar una rehabilitación inmediata durante la etapa “aguda”, para recobrar las capacidades dañadas. Podemos inferir ¿Qué ocurre después de la rehabilitación en la etapa aguda? ¿Cuáles son las consecuencias, dificultades o compensaciones resultantes?

Se utilizarán diversos estudios sobre el TCE, algunos de ellos son: 1) Factores del pronóstico en los TCE, 2) Alteraciones de la atención tras daño cerebral traumático: evaluación y rehabilitación, 3) Secuelas neuropsicológicas del traumatismo, etc. Se analizará que sucede desde ocurrido el accidente, que procesos se ven más afectados a una edad adulta, y como cambia la vida de un paciente después de la rehabilitación. Se sintetizará, como la habilitación de funciones y su mejora puede aportar a una mayor calidad de vida del individuo, después de una intensiva rehabilitación, ¿Cómo continúa la vida de una persona con incapacidades cognitivas o carencia de habilidades, que antes del traumatismo eran una costumbre para él?

Desarrollo

El término traumatismo cerebral adquirido TCA, hace referencia a una lesión en el cerebro que se produce con posterioridad al momento del nacimiento. Como norma general, su causa es de origen traumático (accidente de tráfico, caídas, golpes, etc.). O no traumático (accidentes vasculares, tumores cerebrales, infecciones, hipoxia o isquemia, intoxicaciones, etc.),

(Rios, Benito, Paúl, & Tirapú , 2011) definen, “Es la lesión física o aguda de la cara, cuero cabelludo, cráneo, duramadre o cerebro causado por una energía mecánica externa. Abarca desde el traumatismo más leve hasta el caso en el que el paciente llega al hospital en coma y requiere cuidados intensivos”.

Los daños cerebrales se clasifican en primarios y secundarios. Los primarios, son las contusiones y laceraciones provocadas por un golpe o contra golpe, es inmediato y no puede prevenirse (traumatismo cerrados). Los secundarios, son los daños que tiene un efecto importante en las complicaciones neurológicas incapacitantes e irreversibles, se incluye los secundarios en los “tratables” y son esenciales para la investigación sobre las consecuencias del TCE.

Los efectos o consecuencias en el funcionamiento cognitivo, (Rios, Benito, Paúl, & Tirapú , 2011), se refiere: “Resumir las alteraciones cognitivas en los pacientes con TCE resulta difícil, debido a la heterogeneidad y carácter difuso de las lesiones, lo que hace que prácticamente todas las funciones cognitivas superiores puedan verse afectadas por este tipo de daño”. Los síntomas presentados luego del daño son; la fatiga, falta de concentración, memoria, dificultades de planificación, irritabilidad y apatía.

Las alteraciones frecuentes producidas por los daños cerebrales en el ámbito físico, son alteraciones motoras y de la actividad corporal, por ejemplo, en el paciente se ven reacciones como movimientos incontrolados e incluso temblores corporales, todo comúnmente a consecuencia de un daño en la corteza motora, ganglios basales y cerebelo. Sobre las características cognoscitivas se encuentran afectadas las capacidades como lenguaje, funciones ejecutivas, memoria, emoción, etc.

En el lenguaje hay una disminución de la fluidez verbal, parafasias semánticas, perseveraciones, discursos desorganizados. Estos daños se localizan en el hemisferio izquierdo donde se encuentran las habilidades lingüísticas

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