Planificación jugar por jugar: Jugamos con reglas

Planificación jugar por jugar: Jugamos con reglas[pic 1]

ALUMNAS: Casablanca, Rocio; Torres Yesica.

Fundamentación:

La Ley de Educación Nacional 26.206/06 incluye al juego como objetivo principal prioritario para lograr el desarrollo integral del niño; ya sea cognitivo, afectivo, ético, estético, motor o social. Es entonces que podemos decir que el juego, como contenido, cuenta con gran valor cultural, así como también que es en el transcurrir del juego, más que en alcanzar un objetivo final (que marca el cierre del juego), que se comprende el modo en que las niñas y los niños se aproximan al mundo y expresan, de forma única y personal, su manera de comprenderlo y de apropiarse de él.
Teniendo en cuenta las características anteriormente mencionadas es que nos proponemos realizar una secuencia de juegos reglados, en donde el objetivo central es el acto de jugar solo por el hecho de jugar, pero a su vez se tienen en cuenta los intereses del grupo a la hora de ponerlos en práctica. Al ser un grupo numeroso y muy curioso, consideramos que el jugar en pequeños grupos facilitará la compresión de las reglas así como también el intercambio con sus pares.
Como docentes asumimos el rol activo participante, en algunas ocasiones como un jugador más y en otras ocasiones desde un rol de observador, evitando interrumpir o intervenir con el juego de los niños, salvo en casos que estos soliciten nuestra ayuda pero siempre desde el lado de acompañante en el juego.
Las actividades que propondremos tienen como principio el respeto por la iniciativa, la autonomía de los niños y las niñas, así como también propiciar el juego como espacio en el que se aprenden los modos de interactuar con otros.
La particularidad de los juegos reglados es que requieren de la enseñanza de la regla o la instrucción. La regla constituye una especie de contrato, un acuerdo entre las partes, en donde los niños y las niñas que juegan aceptan las normas antes de comenzar a jugar. Conocer las reglas es el punto de partida desde el cual los niños y las niñas comienzan a jugar, pero también es importante aclarar que conocer la regla no garantiza comprender el sentido del juego. Será la repetición de las sucesivas situaciones de juego quienes afiancen el conocimiento en los niños.

Contenidos:

• Juegos con reglas convencionales

Propósitos:
Con relación a los niños y a las niñas, se asume el compromiso de:

• Brindar repetidas oportunidades de jugar a diferentes juegos que favorezcan la autonomía y la elección.
• Generar instancias de intercambio con los niños de tal manera que pueda generarse una puesta en común que favorezcan las propias ideas junto con las del grupo.

Objetivos:

Que los/las niños/as avancen en sus posibilidades de:

• Realizar preguntas, sugerencias y comentarios sobre los modos en que desplegaron su juego.
• Aprender a respetar los turnos, a aceptar el resultado de los juegos y a desarrollar progresivamente actitudes positivas en la competencia.

Actividad I: La casita robada

Inicio: Se invitará a los niños a que tomen asiento en pequeños grupos en las mesas y se les contará que vamos a jugar a la casita robada. Se entregará un mazo de cartas por mesa, el mismo contará con los números del 1 al 6, y se comenzará a explicar las reglas del juego. Previo a que los niños tomen asiento en las mesas, mientras estos se encuentren sentados en ronda en el suelo, la docente les mostrará, a modo de ejemplo, como se juega y mientras muestra el juego irá explicando las reglas.

Desarrollo: El juego consiste en que un jugador, encargado de repartir las cartas, pueda darle tres cartas a cada uno de los otros jugadores; posteriormente pone cuatro cartas boca arriba sobre la mesa y deja el mazo a un costado. Por turnos, cada jugador roba una carta del centro de la mesa, siempre y cuando haga pareja con una de las que tiene en la mano (tiene que ser de igual número). Ese par de cartas, la que tenía en la mano y la robada, la pone boca arriba en un costado de la mesa, permitiendo que todos puedan ver su pila de cartas o su “casita”. El siguiente jugador hace lo mismo, pero, además de las cartas del centro de la mesa, puede robar la “casita” de su compañero. Si no puede robar porque no encuentra pareja para su carta, deja una carta boca arriba en el centro de la mesa. Cuando todos los jugadores se quedan sin cartas en la mano, el encargado de repartir vuelve a dar tres cartas más a cada uno. El juego termina cuando ya no quedan más cartas en el mazo y gana el jugador que más cartas tiene en su “casita”. Una vez explicadas las reglas se procederá a repartir los mazos en las mesas y comenzar a jugar.

Cierre: Una vez que cada mesa tenga un ganador, se invitará a los niños a comentar de manera grupal el juego, que puedan expresar si les gustó, si les pareció difícil y cualquier comentario que ellos quieran realizar sobre el juego.
Posteriormente se los invitará a guardar las cartas, indicando que las mismas quedarán disponibles para utilizarlas en otra oportunidad.

Tiempo de duración: 10 a 15 minutos

Materiales: Mazos de cartas españolas.

Actividad II: Bingo de números

Inicio: Invitaremos a los niños y las niñas a que se sienten en sus respectivas mesas y les contaremos que jugaremos al bingo. Preguntaremos si conocen el juego y si saben cómo se juega o en qué consiste. De acuerdo a sus respuestas se procederá a explicar cómo se juega.  

Desarrollo: Se explicará que el juego consiste en poner sobre cada mesa un cartón de diferente color y con diferentes números que pueden ir del 0 al 31. Las docentes tendrán una bolsita de donde irán sacando los números, esos números son los que cada niño deberá tachar de su cartón. Para favorecer el juego y que los niños cuenten una apoyatura visual, pegaremos en la pizarra un cartón grande con los números del 0 al 31 y los iremos tachando conforme vayan saliendo. Para que los niños puedan ir tachando los números de sus cartones se les entregarán fichas que podrán poner arriba de cada número.

Daremos inicio al juego cuando una de las docentes mezcle los números, y comience a sacar uno por vez de manera aleatoria, dictando la cantidad correspondiente para que los niños registren el número en sus tableros con las fichas ofrecidas. Se explicará que el objetivo del juego es completar todo el cartón y que gana el primero que lo haga. Se les explicará a los niños que el que primero complete su cartón debe cantar ¡BINGO!, así el resto de sus compañeros se entera que ganó. Se hará hincapié en jugar de manera ordenada y recordar que lo importante no es "ganar" sino divertirse y pasar un momento divertido.

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