EL HOMBRE Y LA EDUCACIÓN
Enviado por Franzziel • 4 de Enero de 2015 • 986 Palabras (4 Páginas) • 280 Visitas
EL HOMBRE Y LA EDUCACIÓN
Para el desarrollo de este inciso baso mi interpretación en la concepción del hombre desde algunas importantes corrientes del pensamiento, el positivismo, racionalismo, el realismo, existencialismo y otras que me permitirán ubicar el cómo se educa el hombre. Es importante manifestar en esta antesala que solo se presentará un recorrido por algunas de las teorías a referir.
Desde la teoría positivista, el hombre no interviene en la construcción de sus saberes; ni de su realidad social por ello, propone una parálisis de orden social descartando la problematización; negando de esta manera sus intervención en la construcción de su educación, yendo este de lo simple a lo complejo y así desaprovechando los métodos de estudio como la dialéctica, la deducción, la problematización. Por lo tanto esta corriente da por sentado que el conocimiento está construido y por lo tanto el sujeto aprende de forma memorística y mecanizada; “El sujeto que aprende se mantiene pasivo y se aprende acumulando memorísticamente los hechos ya ocurridos (datos). Así, el método basado en la memorización fue (y sigue siendo) el más utilizado”1
La educación positivista, persigue un individuo intolerante de pensamientos cerrados, individualista a quien falta el sentido crítico, y si lo hace es sin discernimiento, en este aspecto el sujeto aprende al acumular memorísticamente los hechos ya ocurridos, de esta manera el método que se basa en la memorización fue y continúa siendo el más utilizado.
El hombre que aprende, lo hace sobre una predominancia de los estudios a experimentar y de la forma de enseñar, que se supone debe ser apegado al plan de estudios; para de esta forma lograr que el alumno aprenda para la vida en función de su adaptación. No podemos aprender utilizando aquella frase de “como vaya viniendo vamos viendo”; ya que esto implicaría quedarse sentado a ver pasar la ciencia frente a nuestros ojos sin ver lo que va viniendo, “el positivismo, crea seres mecanizados, útiles en función de sus conocimientos prácticos y saberes instrumentales por lo tanto no se le da importancia a la capacidad del niño y el nivel de desarrollo del mismo”.2
Partiendo de lo anterior, cabe decir, que desde que el ministerio de educación pide al maestro regirse al programa y olvidar los otros factores exógenos que rodean al alumno, ahí se percibe un rasgo positivista en la educación de nuestra época. Más aun, en los actuales tiempos, se dirigen cartas, circulares y otros instrumento ordenantes de lo que se enseña, proyectos que interrumpen de alguna manera el verdadero aprendizaje y entonces así el que aprende no sabe que aprender y el que enseña no sabe que enseñar.
Desde el momento en que se crearon las escuelas, el hombre dejó de ser empírico y ´paso a ser un alumno para recibir de forma sistematizada y mecanizada los conocimientos acumulados de generación en generación. No obstante cuando un hombre entra al sistema educativo ya lleva un cumulo de experiencia conseguido a través de sus años
...