SOCRATES Y LOS SOFISTAS

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En esta labor se expresaran diferentes temas de importancia transcendental ya que se tocaran diversos puntos como los principales rasgos que destacan a Sócrates como emblema filosófico tomando en cuenta sus vértices en cuanto a su ética moral, su inteligencia y su forma de ver la vida desde una perspectiva diferente al mundo entero; lo que conllevó numerosos enfrentamientos por sus desigualdades ideales con la humanidad. A pesar de que la temática remonta sus hechos en ambientes del siglo V antes de nuestra era; se consiguió recopilar información de diferentes fuentes que coordinan el punto en el cual se quiere llegar con el presente, es decir, tomando en cuenta el mundo de esa época, ideas, filósofos, sofistas, entre otros, con el propósito de cualquier paradigma similar: “Explicar el porqué de las cosas” ya que claramente filosofar quiere decir “aprender a morir” pero al aprender a morir, el sabio también aprende al mejor vivir.

LOS SOFISTAS

Los sofistas fueron un grupo de pensadores griegos que vivieron entre la segunda década del siglo V (h. 480) y la segunda década de la centuria siguiente (h. 380). Aunque la mayoría de ellos nacieron en colonias griegas y enseñaron en muchas ciudades helénicas, su labor intelectual la desarrollaron principalmente en Atenas. Los dos sofistas más importantes son, Protágoras y Gorgias. Pero destacan también Pródico, Hipias, Trasímaco y Antifón. Otros sofistas menores fueron Critias, Licofrón, Alcidamante y Calicies. Los sofistas son los creadores del arte retórico, el cual surge de la conciencia de un hecho aparentemente ligero. Estos estudios tenía como disciplinas fundamentales a la retórica (el arte de la persuasión a través de la palabra), a la oratoria (el arte de la elocuencia) y a la dialéctica (el arte de refutar y discutir). Asimismo, la retórica sofista trajo consigo el surgimiento y desarrollo de una amplia gama de ciencias de la cultura: la epistemología, la ética, la psicología, la estética, la teoría de la religión, la sociología y la ciencia política. En la "revolución sofista" que no fue sólo, ni primordialmente, una revolución formal, sino una serie de invenciones con contenidos diferentes en muchas áreas del conocimiento. Podríamos definir a la sofística como una “Filosofía Critica” de la cultura, cuyo origen, objetivo y recurso es el cuestionamiento permanente de todos los humanos.

Atreves de los campos en los que desarrollaron los sofística refleja claramente que el ser humano se había convertido en el centro del pensamiento filosófico, dejando de segundo plano a la naturaleza, preocupación. Con la sofística, el hombre fue como individuo moral y un ser social, como sujeto epistemológico capaz de incurrir sobre su situación a través del saber adquirido, se convierte en la problemática fundamental. Este cambio radical de perspectiva filosófica y la postura crítica frente a todo lo inculcado son características comunes de los sofistas, así como su utilización de técnicas retóricas de diversa índole, su empirismo y escepticismo epistemológicos y, por último, su confianza en la utilidad de la labor pedagógica que realizaban. Si a ello se agrega el marcado individualismo que caracterizaba la conducta personal de los sofistas.

Un elemento, tal vez más destructivo para la vida en sociedad que la crítica a los dioses, es la distinción, tan cara a los sofistas, entre physis (naturaleza) y nomos (ley, convención o costumbre). En su extensión jurídica, esta contraposición entre lo que era natural, y lo que era producto de convenciones humanas, necesariamente terminaba poniendo en duda las leyes de la ciudad. En el Protágoras, Platón pone las siguientes palabras en boca del sofista Hipias: Varones aquí reunidos, a todos los considero parientes y conciudadanos por naturaleza, no por ley, pues lo semejante está por naturaleza emparentado con lo semejante; la ley, en cambio, que es tirano de los hombres, fuerza muchas cosas contra la naturaleza." En otras palabras, por primera vez en la historia de Occidente salía la distinción entre derecho natural y derecho positivo.

LOS SOFISTAS Y EL PUEBLO

El sofismo fue muy criticado y corregido por los grandes intelectuales de la antigua Grecia, pero sobre todo por Sócrates, Platón y Aristóteles.

En un comienzo ser sofista no era deshonroso. Gracias a su preparación e influencia, el sofista fue considerado como la imagen intelectual y carismática del saber, siendo apreciado por gran parte de la élite social ateniense.

Sin embargo, el movimiento degeneró, se convirtió únicamente en un medio lucrativo: manipular a la sociedad griega con argumentos relativos y hasta con falsas nociones tan sólo para obtener alguna utilidad material.

Fueron adjudicados el exagerado uso de la opinión, no importando si estas opiniones fueran absurdas y sin fundamento, y provocaron grandes daños a la educación y formación de los jóvenes griegos.

Las reacciones contra los sofistas, cuyo ejemplo más conocido en un plano no filosófico es la comedia “Las nubes de Aristófanes”, no se hicieron esperar. No podía ser de otra manera frente a un grupo de profesores itinerantes que decían que no había más verdad que las impresiones sensibles de cada quien, que era imposible saber si los dioses existían y que la justicia era en buena medida una convención, es decir, un producto del hombre.

Los sofistas se consideraban a sí mismos, antes que nada, pedagogos. Los sofistas estaban convencidos de su capacidad para transmitir conocimientos en todas las ramas del saber humano. Estos saberes constituían una educación integral que permitiría a los jóvenes desenvolverse con éxito en las diferentes instancias políticas abiertas a la participación ciudadana en la Atenas de entonces.

En resumen el problema es que su forma de manejar el conocimiento degenerò en un juego, en lugar de enseñar a sus alumnos, buscaban crear confusión en ellos "jugaban” con la verdad al inculcar sus ya aceptados conocimientos, que ellos consideraban propio para alcanzar un nivel optimo de sabiduría en su sociedad, la cual estaba saturada de distintos pensamientos, aunque la mayoría de ellos muy poco aceptados.

MÉTODO SOFISTAS

El objetivo de los sofistas era darle la formación a los jóvenes, que ellos consideraban necesaria, para dedicarse a la política.

El sofismo representa el fin del período llamado cosmológico, en que la inquietud del saber se centraba en la naturaleza, y el inicio del período antropológico, centrado en el hombre.

La inestable situación política de Grecia obligaba al ciudadano libre

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