Tema 1 Introduccion a la Fé
Enviado por Stefhano Cancino Bravo • 29 de Mayo de 2019 • Ensayo • 5.751 Palabras (24 Páginas) • 104 Visitas
Universidad Católica del Maule
Facultad de ingeniería
Departamento de ingeniería civil industrial
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Introducción a la Fé:
Trabajo 1
Profesor:
Antonio Calderón
Integrantes:
Stefhano Cancino
Carlos Cifuentes
Bayron Verdugo
Introducción
En el presente trabajo se hace un análisis del ser humano desde un punto fenomenológico desde que nace y se expone al entorno, queriendo satisfacer desde los primeros segundos de vida su egocentrismo y alimentando su narcisismo. El ser humano es el único ser vivo del planeta que sabe que un día morirá es por eso que abordamos el tema de la vida y la muerte, éste último tema es el más frustrante para el ser humano, es por ello que hace de todo por intentar trascender después de su muerte para así dejar un legado y darle un sentido a su vida.
Se analizará como el ser humano mediante lo profano, sagrado, ritos y mitos a creado religiones que tienen en común resolver el tema de la muerte, para así encontrar la “salvación”. Se hará referencia a dos religiones como la budista y el cristianismo, ésta ultima religión parece la más original de todas porque a diferencia de otras religiones propone la salvación como una gracia y no como una búsqueda voluntarista del hombre.
Nos interiorizaremos en el cristianismo, y cómo la Palabra de Dios está inmersa en el libro sagrado de la Biblia y la manera en que éste libro guía a los seres humanos hacía la salvación.
1. Tema 1
1.1 Resumen Tema 1
El hombre como incógnita y como búsqueda
Al describir la situación del hombre se hace un análisis fenomenológico de la vivencia del hombre, es decir, desde el inicio de su conciencia de vida, convivencia y muerte.
Refiriéndose a esto se promulga la tesis del deseo egocéntrico de satisfacción, ese deseo se puede nombrar como narcicismo, que lo describe perfecto para el ser humano hasta los dos años de vida, confrontándose y descubriendo contantemente contra la realidad que no controla(frustración). Este proceso de lucha contra la realidad frustrante forma la base de la cuna de los síntomas neuróticos ulteriores. Esto genera en el ser humano un sufrimiento en el deseo de vivir narcisista, aún en su estado de inconsciencia se ve enfrentado a la inalienable relación entre la existencia y la muerte.
Problema de la muerte
El deseo en la existencia impone la frustración de la muerte misma, siendo evidente en circunstancias extremas en que esta se refleja como en la perdida de familia, pareja amada o el riesgo propio. La comprensión y consciencia de su existencia lo hace saber que vive y análogamente que muere convirtiendo su existencia en un absurdo.
Problema de la vida
Cualquier cosa es tolerable por “salvar la vida”, la vida es un problema fundamental en sí misma al igual que no morir también lo sería, en la situación actual del hombre morir sería una solución a la vida, su monotonía, vacía y decepcionante hasta absurda, dando a entender que la vida es más que el pasar de comer y trabajar continua y repetidamente, por eso el hombre necesita el hacer obras que perduren.
Problema de la convivencia
La convivencia muestra problema de conciencia, que puede encubrir una mala conciencia debido a que la mayoría de pactos de convivencia son imposiciones del más fuerte y eso se entiende debido a que el humano no busca la con-vivencia sino a la voluntad de poder. Esto a veces se ve camuflado con actos altruistas, pero al final consciente o inconscientemente son actos del egocentrismo que en la frase “Homo homini lupus” se expresa, y cuando la falta de convivencia e injusticia hacia el inocente se hace presente.
Alienación y opresión
Se provoca la alienación opresora, debido a los problemas de la muerte y la convivencia que afectan al hombre, derivado en la búsqueda en frenesí de satisfacción máxima del vivir, es decir, “confort/riqueza”, “poder” embebidos en “seguridad” en la vida. Poder que aplica el vivir mejor a costa de los que pueden menos, mediante constantes luchas por el poder que históricamente generan desigualdades, ya que este poder es concentrado por un sector minoritario y dejando a los demás sumidos en la miseria. Esta pobreza crónica creada de mecanismo del materialismo, va acompañada de sistemas de control que mantienen este estado de “equilibrio” o imposición hegemónica, esto se mantiene en el tiempo gracias a la violencia preventiva/represiva vinculada con los poderes económicos-político que suprime en la participación de las decisiones al pueblo perpetuando los intereses de los “más dotados”.
El poder político, ideológico y económico manipula y se fusiona sutilmente en la cultura y experiencia del pueblo, esta inconsistencia mortal y egocéntrica propicia el escenario de la búsqueda de riqueza desesperada legitimada por los sistemas publicitarios y la concepción de seres “admirables” convirtiéndose en un estado de valor. Esta riqueza lleva a su vez a la caída del hombre, ya que la riqueza es alienante por que oculta al rico la otra cara de la moneda, la miseria de la mayoría, provocada por ellos mismos. En el nuevo testamento se hace mención a esta riqueza y ricos, para que hagan la conversión a la pobreza o engaño propio de la posesión de riqueza, que buscan justificarla, a pesar de su cristianismo, pero solo refleja su pobreza de espíritu y dependencia a los poderes de este mundo que habla Mateo, este desinterés de los ricos sobre la miseria que los rodea les permite vivir indiferentes a este. La miseria en sí misma es una situación en cambio la pobreza es una cualidad de espíritu una opción libre, una transformación de la alienación de los bienes terrenos. La liberta de espíritu propia de la pobreza es difícilmente posible en una situación de miseria, es decir, bloqueada por esta situación desesperada y alienadora, ya que monopoliza toda la atención del hombre para salir de esta.
El pecado original
La contradicción de conciencia que intuye el humano entre lo que debería ser la realidad y es, nos lleva la Biblia en un proceso de reflexión de su propia experiencia autónoma, el escenario utópico de la pareja humana y las diferentes situaciones centradas en las tres coordenadas de la existencia, esto en el escenario inicial se evidencia en su estado inamovible de inmortalidad exclusiva de Dios, con convivencia inafectada por la “ley de la selva” e independencia alimentaria que hace todo ser viviente dependiente de las plantas, que a pesar de provocar la muerte de estas y al no expresar quejo no ocasiona una experiencia del matar selvático. Esta se transforma en la decisión propias de Adan y Eva para “comer del fruto del árbol de la vida” símbolo de la conciencia inmortal que afecta la perpetua de este escenario utópico, que les otorga la inconsistencia de la vida o expulsión del paraíso, la imposibilidad de la convivencia armónica entre ellos. Este escenario provocador de la frustración debido al problema de egocentrismo de las pretensiones humanas autónomas perpetuadas en la incapacidad reflejada en la famosa Torre de Babel que hace alusión su nombre.
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