El Estratega

El estratega

Al curso de estrategia para “EPD” (Ejecutivos, Presidentes y Dueños) como es denominado por esa institución, asisten desde diferentes rincones del mundo líderes de grandes unidades de negocio, y algunos otros ejecutivos que ostentan posiciones de alta dirección en esas u otras compañías.

Básicamente, la catedrática de Harvard entrena a los hombres de negocios para asumir los riesgos, medir el peligro y conocer las vertientes más profundas de lo que implica una estrategia sólida, eficaz y contundente.

Una de las primeras preguntas que la autora aborda es la de ¿importa tu compañía? ¿Eres el estratega que tu empresa necesita?, en la que se intenta entender que tan necesarios somos como empresa para los clientes y si de acuerdo a esto, nosotros como líderes estamos logrando por medio de un “propósito claro” la diferenciación que nos hace importantes para nuestros clientes.

Los buenos estrategas nunca están quietos. Sin importar lo bien que se haya concebido, cualquier estrategia practica en una empresa de hoy fracasara si los lideres la conciben como un producto terminado. El estratega debe vigilar este proceso de manera continua; debe identificar y evaluar; decidir y actuar, una y otra vez.

“La estrategia es el corazón del liderazgo que las compañías necesitan de sus líderes”.

¿Cuál es la pregunta más importante que todo líder debería poder responder? ¿Y por qué es esto relevante para su estrategia? Según Cynthia Montgomery este interrogante tiene que ver con la verdadera relevancia de tu empresa: ¿tu compañía importa?

Aunque contrates un gran equipo de asesores estratégicos para tu empresa, siempre es difícil responder a esa pregunta, asegura la autora. Sucede que aun cuando la estrategia podría ser concebida como una disciplina regida por los números y datos duros, Montgomery destaca el rol inseparable del líder y el estratega; al tiempo que recomienda a los líderes concentrarse en las personas a la hora de diseñar y poner en marcha un plan estratégico. Después de todo, no son las empresas las que toman decisiones y definen el rumbo de una organización, sino sus líderes. Y para ello se requiere un liderazgo continuo y no uno regular, en otras palabras un estratega. Un buen estratega nunca está conforme con la cima, el siempre está pensando en cómo mejorar, en su próxima estrategia para seguir siendo el mejor.

Para que un estratega tenga éxito deberá ser dinámico, inquieto y positivo; mostrar confianza ante sus seguidores para conducir la empresa hacia el éxito, deben ser como un súper héroe al que todos los demás participantes de la empresa admiren y respeten. De lo contrario difícilmente podría llegar a ser un estratega.

Ser estratega lleva la gran responsabilidad del éxito de la empresa, pero a la vez del fracaso de la misma, es por eso que debe ser una persona no conforme con el éxito, y si cae, no rendirse ante una situación compleja, por el contrario aprender de sus errores rápidamente y hacerse responsable de sus decisiones y sacar a la empresa lo antes posible de una mala situación, ya que la empresa puede tener muchos años de éxito en el mercado, pero basta con de un instante para su fracaso.

Un estratega es una persona que tiene la habilidad de reconocer necesidades de cambio o circunstancias ante las cuales pueda generar una respuesta exitosa. El mismo debe tener la capacidad comprender que las circunstancias sumadas a sus respuestas producen el éxito en cualquier situación que se presente.

El estratega es capaz de plantear una solución que genere éxito empleando un pensamiento creativo e intuitivo, fundamentado en un continuo análisis de la situación. Las respuestas

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