Cuarteto nº7 op.59 nº1 Beethoven

CUARTETO Nº7, OP. 59, Nº1 MOV. 1 DE LUDWIG VAN BEETHOVEN

Introducción 

        Esta partitura forma parte del primer movimiento del séptimo cuarteto de cuerda escrito por Ludwig van Beethoven, y el primer cuarteto de una serie de tres cuartetos totales llamada Razumovskij. Un cuarteto de cuerda es una pieza escrita para ser tocada por, en este caso, dos violines, una viola y un violonchelo, esto es visto como una de las formas más importantes de la música de cámara; y como es habitual la obra tiene cuatro movimientos. Esta pieza fue compuesta en el año 1805 y se publicó junto con los otros cuartetos el número ocho y el número nueve, en pleno clasicismo, que es el estilo de la música culta europea desarrollada aproximadamente entre 1750 y 1820 por compositores como Haydn, Mozart o Beethoven. Coincide con la época cultural y artística  (en la arquitectura, la literatura y demás artes) hoy denominada neoclasicismo. Tuvo sus grandes centros de difusión en Berlín, París, Mannheim y, sobretodo, Viena. Se caracteriza por la claridad de las texturas, la simetría de las frases, la consolidación de la tonalidad plena y el establecimiento de las formas musicales clásicas (sinfonía, sonata, cuarteto…).

        El compositor de esta obra fue Ludwig van Beethoven (16 de diciembre de 1770 Viena, 26 de marzo de 1827) un compositor, director de orquesta y pianista alemán. Su legado musical abarca, cronológicamente, desde el clasicismo hasta los inicios del romanticismo. Siendo el último gran representante del clasicismo vienes, Beethoven consiguió difundir la música del romanticismo, influyendo en diversidad de obras musicales del siglo XIX. Su arte se expresó en numerosos géneros y aunque las sinfonías fueron la fuente principal de su popularidad internacional, su impacto resultó ser principalmente significativo en sus obras para piano y música de cámara. Su producción incluye los géneros pianístico (32 sonatas para piano), de Cámara (incluyendo numerosas obras para conjuntos instrumentales de entre ocho y dos miembros), concertante (concierto para piano, para violín y triple), y orquesta, es la que ocupa el lugar preponderante nueve sinfonías. Como mencionaba antes, el año en el que fue compuesto este cuarteto de cuerda fue 1805, cuando su sordera ya estaba aumentando, de hecho, Beethoven se confesó preocupado por su creciente sordera su amigo Wegeler, pues el año siguiente escribió el conocido testamento Heiligenstadt, en el que expresa su desesperación y disgusto ante la injusticia de que un músico pudiera volverse sordo, algo que no podía concebir ni soportar.

Incluso llego a plantearse el suicidio, pero la música y su fuerte convicción de que podía ser una gran aportación al género hicieron que seguir adelante. En dicho testamento escribió que sabía que todavía tenía mucha música por descubrir, explorar y concretar. Su música inicial, fresca y ligera, cambió para convertirse en épica y turbulenta, acorde con los tiempos revolucionarios que vivía Europa. Eran años en los que las potencias monárquicas europeas se habían aliado para derrotar a la Francia revolucionaria. En una deslumbrante campaña en el norte de Italia, en la que el ejército austriaco fue derrotado, escribió notoriedad Napoleón Bonaparte, que se con convirtió en un ídolo entre los sectores progresistas. De esta época son la sonata para piano número ocho, llamada la patética, y la sonata para piano número 14, llamado claro de Luna. Su tercera sinfonía, llamada la heroica, estaba escrita en un principio en “memoria de un gran hombre”, napoleón, quien era visto en este momento como un liberador de su pueblo. Cuando se declaró a sí mismo emperador, Beethoven se enfureció Y borró violentamente el nombre de Napoleón de la primera página de la partitura. La heroica se estrenó finalmente el 7 de abril de 1805, mismo año en el que se publicaron los tres cuartetos, compuestas por encargo del conde Razumovski., el embajador de Rusia en Viena.

        Doc.1: Ludwig van Beethoven.

Forma y estructura

        Las siguientes partituras adjuntas se pueden dividir de diferentes formas, primero en movimientos. Este movimiento es una allegro y destaca por dos temas concretos, el primero de todo sería el que expone la introducción (más tarde en la letra G con el cello, el H con el violín primero, y en la letra R) y el segundo tema que más destaca que comenzaría con el violín segundo en la segunda mitad de la letra M.

        Doc.2: tema 1 y tema 2.  

        Éste movimiento se divide en tres partes, en primer lugar tendríamos una exposición o introducción del primer tema y de sus frases siguientes, y acabaría en la letra M, justo con el comienzo del segundo tema. En ese momento comienza la segunda parte y en la letra Q estaría la parte final o re exposición. Cada semifrase está marcado en color.

        La exposición cuenta con la introducción, que sería el tema uno y 10 pequeñas semi frases basadas en el tema uno, por ejemplo, en su ritmo más característico: dos corcheas ligadas seguidas de dos con puntos. (Doc.3) Y después comienzan variaciones y repeticiones de esas semifrases, en la letra G y H con el tema uno, en la K con la semifrase de la letra E, etc. A medida que va acercándose más a la segunda parte, la música va cambiando su carácter hasta llegar definitivamente a la letra M, donde repite una vez más el tema uno antes de empezar con el siguiente tema.

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