Aplicaciones del mindfulness en el manejo del estrés

Aplicaciones del mindfulness en el manejo del estrés

Odalis M. Sánchez

Universidad César Vallejo

Notas del Autor

Odalis M. Sánchez, psicóloga perteneciente al Colegio de Psicólogos del Perú con número de colegiatura 27387. Actualmente, se desempeña como psicóloga clínica en el Módulo Judicial Integrado de Violencia contra las mujeres e integrantes del grupo familiar de la Corte Superior de Justicia de la Libertad.

Cualquier contacto escribir a: ps.marianelasanchez@gmail.com

Resumen

El objetivo de mi estudio fue informar respecto al mindfulness y sus diferentes aplicaciones en el manejo del estrés. Es así como inicio comentando desde los conceptos más generales  hasta sus contribuciones en la psicoterapia. Luego, abordé el tema de estrés en la vida diaria definiendo el estrés y las consecuencias de no saber manejarlo de manera adecuada. Asimismo, hice referencia al sistema de reducción del estrés basado en mindfulnes, a las evidencias científicas que posee esta técnica fundamentada en la meditación y en los cambios a nivel cerebral que se generan al aplicarla. Finalmente presenté las conclusiones de este estudio profundizando respecto a los beneficios de aplicar mindfulness en la vida diaria.

        Palabras clave: mindfulness, estrés, psicoterapia, meditación, cerebral

Aplicaciones del mindfulness en el manejo del estrés

        Mindfulness es la capacidad que tenemos los seres humanos para ser conscientes y estar atentos de lo que pasa en nuestra realidad, evitando hacer juicios y críticas (Siegel, Germen & Olendsky, 2011), dirigiéndonos hacia un estado de relajación y meditación que nos permite realizar mejoras en la interacción con las demás personas y con los elementos de nuestro alrededor. Esta técnica fue desarrollada y  basada en un tipo de meditación vipassana, de la filosofía budista, traída a la actualidad por Kabat Zinn (Kabat-Zinn, 2013).

        Durante los últimos años, mindfulness no solo ha significado poder meditar sino que ha sido utilizada para tratar diversos problemas personales, basados en el estrés, los cuales desde 1979 se han desarrollado bajo la denominación de Sistema de Reducción del Estrés basado en el Mindfulness, generando así diversas investigaciones sobre su eficiencia, produciendo resultados con respuestas favorables como la mejora de la salud física y mental de los residentes de una comunidad en West Virginia (Williams, Kolar, Reger & Pearson, 2001).

Es así como, haciendo referencia al párrafo anterior, se comprende que esta técnica permite que las personas lleguen a conectarse consigo mismas y a desarrollar sus recursos más profundos para mejorar su aprendizaje, crecimiento, sanación y transformación de la forma en la que perciben quiénes son; permitiéndoles lograr el bienestar, felicidad y la interiorización del significado de su vida (Kabat-Zinn, 2013).

        Segal, Williams y Teasdale (como se citó en Macia, Alcazar, Olivares, J. y Olivares, P., 2013) refieren que otro aspecto importante del mindfulness es su contribución para los trabajos terapéuticos, basándose en la premisa de sentirse bien para poder hacer sentir bien a los demás, es por ello que los terapeutas que han desarrollado personalmente la técnica han logrado generar mejores resultados en sus pacientes.

De esta manera, esta técnica ha permitido que los pacientes describan a sus terapeutas como personas que saben ponerse en el lugar de ellos para poder entenderlos desde su propio lugar, con una actitud positiva y colaboradora (Norcross y Wampold, como se citó en Germer, Siegel & Fulton, 2015).

        Actualmente, muchas de las enfermedades y/o problemas emocionales están basados en la forma en cómo afrontamos las situaciones de estrés; definiendo al mismo cualquier tipo de cambio de la situaciones o del entorno de las personas que puede afectarlos, llevándolos a percibir estados de presión, frustración y falta de control de las cosas (Sierra, Ortega y Zubeidat, 2003).

        Teniendo todas estas consideraciones, se puede decir que la técnica del mindfulness logra el desarrollo del estado de la felicidad, sobretodo cuando se pone en práctica diariamente para superar las diversas dificultades que se presenten en los quehaceres cotidianos. Es por ello que más adelante describiré cuales son las formas en que el mindfulness interviene de manera positiva en el manejo del estrés de las situaciones cotidianas.

Estrés en la vida diaria

        American Psychological Association (2018) refiere que el estrés es definido como cualquier experiencia emocional incómoda que genera cambios a nivel bioquímico, físico y comportamental los cuales pueden presentarse a través de estados de malestar, preocupación, ansiedad y cansancio.

Por otro lado, Redolar lo denomina como:

“El estrés es una respuesta adaptativa de nuestro organismo destinada a movilizar recursos energéticos, a corto o a largo plazo, para dar una respuesta a una demanda del medio. Sin embargo, los recursos energéticos son limitados. De este modo, si es necesaria una respuesta sostenida en el tiempo, lo que hace el estrés a largo plazo es «apagar» sistemas que requieren mucho gasto energético y no son necesarios para esta demanda del entorno: nuestro sistema de defensa contra la infección, la respuesta sexual, el crecimiento, etcétera. Imaginemos la siguiente situación: en nuestro trabajo hacemos muchas más horas de las que nos toca por contrato y, por si fuera poco, este mes debemos poner en marcha un proyecto que consumirá toda nuestra atención y nuestras energías” (2015, p.35).

Sistema de Reducción del Estrés basado en Mindfulness

        Dentro de la técnica del mindfulness se desarrollan determinados pasos que van a permitir llegar al estado de plenitud de la conciencia y por ende la reducción del estrés, por lo cual es necesario que se puedan seguir estas siete recomendaciones básicas (Kabat-Zinn, 2016):

        Pensar que conocemos nuestra realidad basado en ideas, experiencias y pensamientos previos que hace que evitemos disfrutar del experimentar cada una de éstas como situaciones nuevas, lo cual se denomina Mente de Principante.

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