El Rol Docente

Índice.

Introducción ......................................................................................... 2.

Disciplina, autoridad y convivencia..................................................... 4.

La violencia en la escuela ................................................................... 4.

Enseñando ejercemos poder ................................................................. 5.

El ejercicio de poder en la escuela los distintos modos

de influir sobre la conducta de las personas .......................................... 5.

Un orden de convivencia. Régimen tradicional

Y régimen conservador ......................................................................... 6.

Entre la disciplina y la convivencia ....................................................... 7.

Manipulación y poder ............................................................................ 8.

Una concepción diferente de la autoridad .............................................. 8.

No ocultar el poder ................................................................................. 9.

Conclusión .............................................................................................. 10.

Bibliografía ............................................................................................ 11.

INTRODUCCIÓN.

En el presente trabajo nos referiremos a los datos recabados en la investigación sobre el problema que existe sobre el poder en el sistema educativo, para el cual a modo de introducción ofrecemos un breve análisis del rol docente inserto en dicho sistema y su interacción con los distintos personajes que modifican las conductas sobre educadores y educandos.

El docente tiene un rol fundamental en la formación intelectual del alumno, así como también moldea su formación ética y moral; y en la adquisición de valores que lo llevan a ser un individuo integro. Cabe aclarar que es de vital importancia la contención y el apoyo de la familia en este caso; trabajando de manera conjunta con la escuela.

Para que este aprendizaje de nuevas conductas se lleve a cabo de manera positiva, es fundamental que el alumno sea valorado de manera positiva y sea considerado “persona”. Se han observado notables progresos en alumnos cuyos docentes tienen:

- La facultad de comprender la significación de la experiencia vivida por el alumno en clase y expresan dicha comprensión.

- El respeto del docente hacia el alumno tomado aisladamente.

- La autenticidad del maestro en su relación con el alumno.

Que el alumno sea considerado persona, incluye también que el docente sea también persona en su clase, ya que la gran mayoría muestra una imagen profesional sin enfrentar al alumno como persona autenticas, humanas, que experimentan sentimiento, piensan y manifiestan defectos y virtudes.

La relación docente- alumno es de ida y vuelta por lo tanto un docente que aplica en su clase estas actitudes determina un cambio notable en las reacciones de los alumnos, las cuales resultan gratificantes para que el docente se sienta impulsado a tener reacciones mas auténticamente empaticas.

Vivimos inmersos en una sociedad que se ve afectada por un profundo proceso de transformaciones culturales, sociales, económicas, consecuencias de la globalizacion. Para esta nueva sociedad que repercute directamente en la educación es necesario contar con docentes competentes y con distintas capacidades. Los tres pilares de la triada; alumno- docente- conocimiento, deben funcionar conjunta y coordinadamente y permitir al educando construir su propio proyecto de vida. La nueva escuela debería centrar sus practicas en un aprendizaje significativo.

El docente ejerce su rol dentro del edificio escolar, es un empleado, un trabajador, influye también en la formación del alumno la preocupación acerca de la Institución Educativa. Aspectos relativos a cómo está organizada la escuela, cómo se establecen las relaciones, que grupos conformamos, que relaciones se establecen con la comunidad, cuáles son los canales de comunicación y de participación entre otras cosas.

La Institución educativa no solo es el edificio, las normas y el reglamento que la rige, sino que está atravesada por múltiples elementos que le dan significación. Además está conformada por los actores sociales que se relacionan de diversas maneras con la institución (directivos, docentes, alumnos, padres, etc.). La compleja trama de grupo y relaciones es lo que le da identidad, lo determina su estilo. La dinámica entre los elementos instituidos es insuficiente, es lo posibilita los cambios, reacomodamientos, búsqueda de nuevos sentidos. En una institución muy cerrada prevalecen fuertemente los elementos instituidos; una institución muy abierta y democrática logra una permanente dinámica entre estas fuerzas ( elementos instituidos e instituyentes).

El docente desarrolla su accionar apoyado en teorías pedagógicas; las cuales están sustentadas en los supuestos básicos subyacentes, estos supuestos sirven para revisar la practica docente; hacerla más competente; analizar culturalmente los fundamentos didácticos y pedagógicos que son variados y complejos.

Los supuestos básicos y subyacentes más determinados son: el aprendizaje; la función de las instituciones educativas y el rol docente. De ellos se desprenden múltiples supuestos que se articulan de manera diferente.

Al pensar en el rol docente como “disciplinador sistemático de los alumnos” introducimos la cuestión del poder.

El poder se ejerce sobre el alumno en el aula a través de un docente, de diversas metodologías, desde las más tradicionales como vigilar y castigar, hasta las metodologías de maestros sonrientes y dispuestos, dialoguistas y abiertos. Que el alumno estudie, este motivado, se interese y responda a la demanda institucional: ese es el modelo que el poder establece. En el desarrollo de este trabajo se ampliaran estos conceptos.

Profesionalidad:

Es fundamental el análisis de la profesionalidad docente. La formación de nuevos maestros y la autonomía de los mismos.

Para favorecer y posibilitar los aprendizajes el maestro ha

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