Traumas
Enviado por Filiadei • 17 de Febrero de 2013 • Tesis • 1.448 Palabras (6 Páginas) • 437 Visitas
Traumas
se denomina trauma psíquico tanto a un evento que amenaza profundamente el bienestar o la vida de un individuo, como a la consecuencia de ese evento en el aparato o estructura mental o vida emocional del mismo.
En los términos de la psiquiatría un trauma es definido, indirectamente, como "exposición personal directa a un suceso que envuelve amenaza real o potencial de muerte o grave daño u otras amenazas a la integridad física personal, o ser testigo de un suceso que envuelve muerte, daño o amenaza a la integridad física de otra persona, o enterarse de la muerte no esperada o violenta, daño serio, amenaza de muerte o daño experimentados por un miembro de la familia u otra relación cercana (criterio A 1). La respuesta de la persona al suceso debe envolver miedo intenso, sentido de incapacidad de ejercer control u horror. En niños, la reacción debe envolver comportamientos agitados o desorganizados (criterio A 2)" ( Trastorno por estrés postraumático en DSM- IV).
Trauma en la concepción de Freud
Para Freud el trauma es un aflujo de excitaciones excesivo que resulta intolerable para el psiquismo. Se trata de un acontecimiento en la vida del sujeto, una experiencia vivida que aporta, en muy poco tiempo, un aumento tan grande de excitación a la vida psíquica, que fracasa toda posibilidad de elaboración. Entonces el psiquismo, al ser incapaz de descargar una excitación tan intensa, no tiene la capacidad de controlarla y eso origina efectos patógenos y trastornos duraderos.
Para Freud el trauma se da en dos tiempos. Considérese el siguiente caso: una paciente ve a su tío en la cama con una prima. En consecuencia, desarrolla síntomas. Pero otras escenas similares anteriores no los habían producido. ¿Podría ser que en esa ocasión algo fue despertado en ella, algo que no podía tolerar? En otro caso, muere la hermana de otra paciente, por cuyo marido la paciente sentía gran afecto. Lo primero que ella pensó fue "ahora él está libre para estar conmigo". Casi inmediatamente, rechaza la idea. Poco después, los síntomas se hacen presentes.
Freud postula que incidentes tales como los anteriores son traumáticos no solo porque evocan una emoción fuerte, sino porque hay otra emoción, igualmente fuerte, que se le opone: el deseo por el marido, opuesto al sentido de decencia y respeto por la hermana. El disgusto al ver al tío teniendo relaciones sexuales con un familiar cercano, opuesto a un deseo sexual por el tío. Pero hay un elemento adicional: a pesar que el escenario es claro para el observador, los pacientes mismos parecen no percibirlos. Además, tenemos el problema de explicar la persistencia de esos deseos y pensamientos: existen contra la voluntad del que los piensa. Seguramente si las ideas fueran el simple resultado de nuestra voluntad, aquello que no deseamos no existiría como idea.
Consecuentemente, Freud busca el origen de esas fuerzas o energías que "crean" o mantienen esos deseos o ideas y los conflictos que deben existir a fin de crear las situaciones descritas. En esa búsqueda, Freud genera los conceptos de Pulsión como la energía que mantiene los procesos mentales y una concepción de la mente que no es ni totalmente racional ni con una estructura unitaria (ver: Ego, Superego e Id)
Freud eventualmente concluye que debe haber no solo un conflicto interno de emociones que produce una acumulación de "energía", sino además un falencia en la descarga o uso de esa energía en la génesis de un trauma. Una paciente alucina con el olor de pasteles quemados. Esa alucinación comenzó cuando ella, trabajando como empleada de una familia, recibió una carta de su madre y los hijos de la familia le arrebataron de sus manos, Justo en ese momento unos pasteles se quemaron. ¿Cómo, sin esos conflictos y esas energías, se puede explicar que algo tan trivial se transforme en "incidente traumático"?5
Como resultado de todo lo anterior, lo traumático es, para Freud, simplemente aquello que causa síntomas. Un incidente es traumático no solo porque incrementa esos conflictos internos sino porque de alguna manera los llevan a la consciencia y esos conflictos no puede ser tolerados conscientemente.
En otras palabras, para Freud, un trauma no es producto de un incidente, por fuerte o dramático que sea, o una emoción, sino de por lo menos dos, que están, junto a las ideas y deseos asociados, en conflicto. El individuo ha "resuelto" ese conflicto a través de no estar consciente de él. En algún momento, algo lo obliga a darse cuenta de ese conflicto. Los síntomas son, en esta visión, no tanto producto de una disfunción mental, como una tentativa de evitar dejar entrar en la consciencia el conflicto. Por ejemplo,
...