Contratos Mercantiles

|CONTRATOS MERCANTILES.

1.- Introducción.

El estudio de los contratos mercantiles no encuentra origen independiente de los contratos civiles. Escasos preceptos encontramos en el Código de Comercio y demás leyes mercantiles sobre obligaciones y contratos mercantiles en general (Rafael de Pina Vara). Es por este motivo que la reglamentación del Código Civil vigente en el D.F., es ley supletoria de los contratos mercantiles a falta de disposición expresa en las leyes mercantiles.

“Hay que tomar en cuenta las disposiciones, de aplicación federal, que tienden a la protección del consumidor. Para los efectos de este estudio entenderemos como “Derecho común” a la conjunción del Derecho civil o privado, y derecho mercantil, de reglamentación de derecho federal (código de comercio y otras leyes mercantiles).

En tales circunstancias conviene recordar someramente algunos conceptos de derecho común, en cuanto sean aplicables a la mejor comprensión de las instituciones de derecho mercantil que vamos a estudiar.

2.- Las obligaciones. Concepto.

“Se dice que el mercantil es derecho de obligaciones (De Pina Vara pág. 189)

“Obligación es, dice el maestro Borja soriano, la relación jurídica entre dos personas, en virtud de la cual una de ellas, llamada deudor, queda sujeta para otra, llamada acreedor, a una prestación o a una abstención de carácter patrimonial, que el acreedor puede exigir del deudor.” (Teoria General de las obligaciones, México, 1953, T.I.P 81.)

3.-Modalidades del concepto obligación.

Obligaciones de dar, de hacer o de no hacer.

a).- Dar. Las obligaciones de dar consisten en la representación de una cosa, esto es: 1.- En la traslación del dominio de una casa. 2.- En la enajenación temporal del uso o goce de cosa cierta; 3.- En la restitución de cosa ajena o pago de cosa debida.

Las obligaciones de hacer. Consisten en la prestación de un hecho, de una actividad en favor del acreedor.

Las obligaciones de no hacer. Consisten en la abstención del deudor de realizar determinado hecho.

b).- Puras condiciones y a plazo

• Las puras son las incondicionales y sin plazo

• Condicionales: Son las obligaciones que para su existencia o resolución dependen de un acontecimiento futuro e incierto.

• Cuando del cumplimiento de la condición depende de la existencia de la obligación, se dice que la condición es suspensiva.

La condición es resolutoria cuando al cumplirse se resuelve (destruye) la obligación, destruyendo retroactivamente sus efectos, volviendo las cosas al estado que tenían, como si tal obligación no hubiera existido.

• Es obligación a plazo aquella que para su cumplimiento se ha señalado un acontecimiento (o día) futuro y cierto.

c).- Conjuntivas y alternativas. Cuando el deudor se ha obligado a dar diversas cosas o a prestar distintos hechos, debe dar a todas las primeras y prestar todos los segundos. Entonces la obligación será conjuntiva.

Si el deudor se ha obligado a uno de dos hechos o a una de dos cosas o a una cosa, al prestar cualquiera de esos hechos, o al entregar cualquiera de aquellas cosas, habrá cumplido su obligación; y esta será alternativa.

d).- Mancomunadas y solidarias.

Cuando tratándose de una misma obligación, hay pluralidad de deudores o de acreedores, existe mancomunidad. En este caso el crédito o la deuda se consideran divididos en tantas partes (que la ley presume iguales, salvo pacto en contrario) como deudores o acreedores haya, y cada parte constituye una deuda o un crédito distinto, uno de otro.

Solidaridad.- Es activa cuando dos o más acreedores tienen el derecho de exigir cada uno de por si, el cumplimiento total de la obligación.

Hay solidaridad pasiva cuando dos o más deudores reportan la obligación de prestar, cada uno de por sí

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