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El Fetichismo.


Enviado por   •  25 de Septiembre de 2014  •  2.402 Palabras (10 Páginas)  •  163 Visitas

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Fetichismo de las mercancías y su secreto y la lectura de Carlos Kautsky.

En la vida cotidiana existen cosas que creemos naturales: la mercancía es una de ellas. Si bien recordemos que para creer se necesita que otros también crean en lo que uno cree: una relación humana e inter-subjetiva. El lenguaje, podría ser, una muestra de algo que “a ojo de buen cubero” parece natural: sin embargo el lenguaje es lo más antinatural del mundo. Constituye un sistema de símbolos y signos que desempeñan una función en la comunicación de una sociedad determinada: el capitalismo. Por lo tanto, dentro de todas las ciencias modernas, el lenguaje que se habla es precisamente el de la economía. Y precisamente la mercancía representa una célula dentro de ese cuerpo llamado sistema social: al igual que en un organismo, el ADN representa la parte más pequeña del humano, la mercancía es la primera forma de todas las relaciones inter-humanas.

¿Cómo comienza esa relación?

Desde la caída del feudalismo y con la llegada del capitalismo, las mercancías tomaron un lugar privilegiado dentro de las relaciones sociales. ¿Cómo es posible que un concepto propio de la economía pueda acaparar varios sentidos de las ciencias sociales y del humanismo? Bueno, pues es por el hecho de que la mercancía, en sí misma, es un cumulo de relaciones y prácticas sociales. Como dije antes, dicho concepto es la célula madre de la mayoría de las relaciones sociales dentro del capitalismo. Un ejemplo: las personas están tan acostumbradas al trabajo que si dejan de hacerlo inmediatamente mueren: incluso “el ciclo de la vida humana” es el mismo que el de una industria: nace, se reproduce y muere. Pero no siempre fue así: en un principio la mercancía nació como la manera de satisfacer las necesidades del hombre dentro de la sociedad. Pero con la creación del liberalismo y demás paradigmas (positivismo en lo científico y protestantismo en lo religioso, por ejemplo) las actitudes entre humano se volvieron utilitarias, egoístas y objetivas, dando inicio a una aparente relación de cosas entre cosas. El humano se convirtió en mercancía. De ahí el dicho “Tú eres lo que haces”. Sin embargo este pensamiento “libre y moderno” dejo de lado reglas que si pudiéramos llamar naturales: las relaciones sociales entre hombres. Por lo tanto la mercancía no nació sola sino por medio de un sistema de leyes atadas a un contexto: la primera regla para la formación de una mercancía: es que es un producto generado por el trabajo del hombre, en un tiempo y espacio determinado, o sea, la mercancía no nace naturalmente. De las relaciones humanas nacen los dichosos “atributos cuantitativos y cualitativos” para finalmente ofrecer un servicio dentro de un sistema social.

Algunos economistas clásicos (como Ricardo) afirmaban que tanto el trabajo como la mercancía eran parte de un ciclo natural en el hombre y que el hombre “nada podía hacer para evitarlo. En pocas palabras: la mercancía maneja al hombre y al revés. No obstante nada producido por el hombre es natural, pues para crearlo se tuvo que destruir el orden natural de las cosas.

¿Qué es el fetichismo?

Pues bien, cuando un objeto entra en escena (al mercado) como una mercancía se transforma en una “cosa” sensorialmente suprasensible (todo-poderosa). Esta característica no deviene del valor de uso, sino del valor de cambio, o sea de la forma en que esta cosa entra en intercambio en un mercado global. El carácter social es lo que dota de cuantía a un objeto y por lo tanto es donde adquiere dicha propiedad llamada: Valor. El valor no es algo natural, es una propiedad que sintetiza el trabajo de los hombres y que queda representada en los objetos materiales (las mercancías). Un ejemplo: Peña Nieto no es presidente porque haya “tenido vocación política” como él dice. Es presidente de México porque los “mexicanos” (claro, hablando tecnocráticamente) lo escogieron como cabeza de los asuntos del país. Ya lo dijo Polo-Polo en uno de sus chistes: no es lo mismo coger como plebeya, que coger como princesa son dos mundos diferentes”. Decir que Peña Nieto es el malo de la película mexicana es un fetiche: pues estamos dejando de lado las relaciones sociales que se esconden detrás de él (neoliberalismo, Estados Unidos, empresarios y demás).

El fetichismo, como concepto, podría representarse como una bola que tira los pinos dentro de un juego de boliche: Pues destruye la idea de “libertad” impuesta por el liberalismo. Con el liberalismo las cosas se volvieron más privadas que antes. En pocas palabras las personas se convirtieron en objetos; ya no era el hombre que hacía pan, ahora se llamaba panadero. Una función que deja de lado al humano detrás del oficio. Entonces con el aumento en la diversidad de empleos: la forma de intercambio se volvió más selecta y llego el momento en con tantos oficios (privados) se volvió imposible un intercambios. Entonces de las piedras preciosas (objetos que jamás varían en valor por sus propiedades minerales y demás) surgió el dinero. La mierda en el pastel (recordemos que en los símbolos dentro del psicoanálisis, la mierda representa el dinero y es precisamente porque lo que comemos (materia prima) termina convirtiéndose en heces, por medio de un sistema parecido al de la mercancía). Lo enigmático del dinero es que en lugar de representar las relaciones sociales, termina cubriéndolas (igual que Peña Nieto en las relaciones políticas y económicas del país).

¿Por qué se ocultan las relaciones sociales detrás del dinero y de las mercancías?

Aquí viene lo bueno: La forma mercancía es una práctica de la sociedad burguesa por lo tanto, al igual que Dios lo hacía con los nobles y conservadores, (re) vela los intereses de dicha clase dominante dentro de su mismo juego. A los inversionistas no les conviene aparecer en público entonces crean fetiches para las masas: recordemos las botargas (Pancho Pantera, DR. Simi, el conejo del cereal…etc.) de las empresas, sirven como medio de ocultar la verdadera cara de la empresa y a la vez crean una necesidad para los niños y un ideal para que se identifiquen (Steve Jobs) etc. Otra característica del fetichismo es que lo social se convierte en natural: para muestra una frase: “el humano es sociables por naturaleza”, ¿de verdad? ¿Entonces por qué el humano rompió (y sigue haciéndolo) con el orden de la misma naturaleza (guerras, explotación)? Si de algo ha servido el capitalismo es para mostrarnos “al sapo detrás del príncipe azul”: Bill Gates aparece como un “nerd” bonachón en público, pero detrás de cámaras es un empresario megalómano. Usando el lema de los expedientes secretos x: la verdad siempre está afuera.

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