La Cerveza

Para muchos la cerveza es una bebida alcohólica elemental para amenizar reuniones, fiestas o puede ser un buen acompañante mientras se observa un evento deportivo, a la hora de la comida o en una tarde acalorada, etc. Pero detrás de esta bebida existe una gran historia, que muchos desconocemos, desde su evolución a través del tiempo, sus ingredientes y método de elaboración.

La cerveza es una de las primeras bebidas fermentadas de las que se tiene registro histórico, se cree que existía en Mesopotamia y sumeria en el año 10 mil A.C. posteriormente los egipcios la elaboraban a base de pan y otros ingredientes y la llamaron zythum, que significa vino de cebada. En la edad media, se refinó el proceso agregando lúpulo una planta que le da el sabor amargo característico y ayuda a su conservación. En el siglo XV en Alemania se promulgo la ley de pureza de la cerveza que dictaba que solo podía ser producida con 4 ingredientes: agua, cebada, lúpulo y levadura. En el siglo XVIII se incorpora la maquina de vapor a la industria y se desarrolla su producción en frio y al final del siglo XIX empiezan a aparecer pequeñas fabricas desarrollando así la industria que conocemos hoy.

Para elaborar la cerveza se utilizan ingredientes como: agua, lúpulo, levadura y malta o cereales malteados, así como otros ingredientes llamados grits que pueden ser otros cereales en crudo, frutas y especias ayudando a mejorar el sabor y consistencia de la cerveza.

El proceso de elaboración se divide en tres fases principales que son: cocimiento, fermentación y reposo.

En el cocimiento se obtienen los extractos de la malta, el lúpulo y las materias auxiliares como los grits para obtener un mosto que posteriormente se filtra para fermentarlo. En la fermentación se agrega la levadura para convertir los azucares simples en alcohol etílico y dióxido de carbono, en el reposo se deja sedimentar la levadura y los residuos de la materia prima para refinar su sabor y carbonatar la cerveza.

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