Narrativa educación parvularia

Metamorfosis en mi presente.

Paula Navarro

Transcripción:

• ¿Por qué elegiste esta carrera?

“Porque me interesa y me encanta el hecho de ser parte fundamental de la educación de un niño, así mismo, ayudarle a comenzar el proceso de aprendizaje de manera que sea adecuada para él. También porque siento que la niñez necesita ser salvada, es decir, no perder las relaciones interpersonales, los valores, el amor, y por sobre todo la ayuda que se le puede dar al niño como a su familia.”

• ¿Por qué elegiste el pedagógico?

“Porque es una universidad dirigida sólo al ámbito docente lo que debería ser un punto a favor para el estudiante ya que te entrega herramientas para ser un buen profesional de la educación, además me gusta que tenga muchas áreas verdes.”

• ¿Me proyecto como la imagen en 5 años más?

“Por supuesto, me encantaría ejercer mi carrera, pero continuaría mis estudios y así ser una buena educadora.”

Mi visión de la educadora de párvulos mediante un dibujo.

La concepción que tenía al principio del taller me causa distintos tipos de emociones pues gracias a la experiencia dentro del aula con niños reales, contextos distintos, metodologías distintas y visiones variadas me han entregado un contraste nuevo del que tenía previamente.

Me gustaría comenzar por una de las primeras actividades que realizamos, el cual consistía en dibujar una educadora de párvulos y, por supuesto, todas sus características que esta conlleva. El primer punto a desarrollar es:

1. Escolarización: Dibujé una sala de clases llena de vocales, números, conjugaciones y un espacio con valores los cuales serían inculcados por la educadora y practicados por los párvulos. No había analizado en mi dibujo el nivel de escolarización que este tiene pues, a pesar de que los niños están jugando, no lo hacen afuera, en el patio.

La sala de clases es un espacio en el cual los niños aprenden y pasan la mayor parte de su tiempo, sin embargo, es fundamental que también tengan contacto con su entorno, que conozcan nuevos espacios de aprendizaje, es por esto que comparto las ideas pedagógicas de Amanda Labarca:

 “Consideraba que el punto de partida de cualquier intervención educativa había de ser el nivel de desarrollo de las niñas y los niños y sus capacidades e intereses individuales, unido todo ello -por su incondicional compromiso con la población chilena- con una formación a la medida de su país.”  (Guil, A. y Vera, S., 2010)

Es sumamente importante respetar al niño conforme sus tiempos educativos y como lo dice la cita, sus capacidades, es necesario que se use lo positivo para corregir lo negativo, es decir, si el niño está haciendo alguna actividad mal, alentarlo de manera positiva sin decirle “no” a que siga intentando o que corrija la actividad, la forma más eficiente de hacerlo es dando el ejemplo de cómo realizarlo, de esta manera el niño se sentirá motivado a seguir aprendiendo. Las correcciones violentas o negativas son unas de las metodologías normalizadas que tienen los sistemas escolarizados, los cuales solamente ayudan a disminuir el interés en escuchar a la educadora y, por consiguiente, estudiar.

Sobre 4 ejes se construye el desarrollo infantil en esta primera etapa de la vida: (a) la familia en toda su extensión, (b) el medio social y cultural en el que vive, (c) la escuela infantil incluyendo la oferta curricular que desarrolla y su dinámica de funcionamiento y (d) los adultos significativos con los que el niño/a se va encontrando. Entre éstos últimos podemos llegar a jugar un papel muy especial sus profesores/as. Probablemente no jugamos un papel tan esencial como la familia (aunque en ocasiones estamos llamados a complementarla), pero el nuestro resulta igualmente relevante para el desarrollo de los niños pequeños escolarizados. (Zabalza, Miguel y Zabalza, Maria, p. 104)

En un ambiente muy escolarizado (tal y como dice la cita) es importante la presencia de los adultos, es por esto que la educadora debe ser un pilar para el niño que se enfrenta a un ambiente nuevo y distinto que al de su hogar. No se puede luchar con la escolarización porque lamentablemente ese es el panorama chileno, sin embargo, una buena educadora (y es lo que yo haría en esta situación) creará o modificará los contenidos de aprendizaje a los intereses de ellos y también conforme su contexto sociocultural sin olvidar también el económico, para que los niños se adapten al sistema educativo vigente sin dejar de lado la creatividad y la imaginación.

En mi concepción, el rol de la educadora y su metodología de enseñanza no solamente tiene que ser en sala, sino que afuera, en parques, plazas, museos, etc. Que los niños tengan posibilidad de moverse, bailar, cantar, gritar, jugar y diversas actividades que son tan importantes y significativos para ellos, sin embargo, si el centro educacional en el que estuviese trabajando me exige un ambiente escolarizado, agotaría mis recursos para no hacer una clase tan invasiva para ellos (como lo dije anteriormente), por lo que el dibujo que hice me lo cuestiono pero al ver la realidad en el que se enfrentan las educadoras día a día, busco soluciones y herramientas para mejorar este sistema que probablemente es el que me tocaría vivir.

1. Juegos Sexistas: 

“Los estereotipos que se han establecido sobre los roles y conductas propias del hombre y la mujer impiden un desarrollo libre y espontáneo de las personas, bloqueando sus características creativas, sus capacidades de ser auténticos, libres y empáticos con la diversidad.” (Mühlhauser y Romo, 1999.)

En mi dibujo no hay diferenciación de género con respecto a métodos de aprendizaje y juegos, pues en mi concepción de educadora y su metodología de enseñanza, es súper importante no estereotipar las herramientas y materiales con que ellos se relacionan en la sala de clases para aprender, es un punto donde reafirmo esta situación básicamente porque moldean a los niños desde muy pequeños a hacer o no hacer cosas conforme a su sexo y así, poco a poco se van configurando a lo que se considera apropiado o no para cada uno, limitando su espontaneidad y trabajo pleno de su etapa propia como niño y sus características que es lo que yo, como educadora de párvulos, no busco implementar en mi sala de clases.

Yo como educadora de párvulos.

1. ¿Por qué me interesa el hecho de ser parte fundamental de la educación de un niño?

Porque me siento motivada de educar, proteger y estar en contacto especialmente con los niños como profesora. La primera infancia es una etapa muy importante en la vida de una persona por lo que tener un especial cuidado con él (me refiero tanto a la parte afectiva como a la educacional) en esta etapa es lo que más me hace me hace sentido.

“Las historias de vida ofrecen un marco interpretativo a través del cual el sentido de la experiencia humana se revela en relatos personales de modo que da prioridad a las explicaciones individuales de las acciones (…)” (Chárriez, M., p. 52)

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