ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Trabajo Docente


Enviado por   •  30 de Septiembre de 2014  •  1.339 Palabras (6 Páginas)  •  232 Visitas

Página 1 de 6

En el presente trabajo se darán a conocer puntos importantes de diferentes autores que podrán servir para el trabajo como docente y para el desarrollo del estudiante normalista (docente en formación), donde podrá darse cuenta de la postura importante que toma su papel, tomando como referencia las lecturas: “Una tarea abierta: pensar la buena enseñanza” Silvina Gvirtz y Mariano Palamidessi, “¿Cómo enseñar?... o el problema de la metodología de la enseñanza” de César Coll, “La competencia de los profesores” Michel Saint-Onge y “Evaluación: concepto, tipología y objetivos” Ma. Antonia Casanova, el objetivo principal de éste trabajo es que se reflexione ante las circunstancias que se están viviendo, satisfaciendo las necesidades del desarrollo educativo.

La educación tiene la finalidad de formar al ser humano como persona capaz de actuar libre y responsablemente en la sociedad. Esta tarea implica una serie de actitudes, condiciones y capacidades, que conllevan a un compromiso personal por parte del docente y de la institución educativa, ya que éstos serían el principal motor para que dicha finalidad se cumpla en los educandos. “Las escuelas y los equipos docentes deben reconstruir aquello que consideran una buena enseñanza” (Silvina Gvirtz y Mariano Palamidessi, 1998), considerando las necesidades que se tienen los alumnos, logrando una comprensión, y así mismo obteniendo aquellos aprendizajes que esperan que éstos desarrolle y pongan en práctica para un futuro.

Cabe destacar que nadie, hasta el momento, conoce la definición exacta de lo que es una buena enseñanza, como maestro o estudiante normalista puedes tener una noción de lo que esto quiere decir, pero como ya se dijo, nadie conoce el concepto verídico, sólo se tiene una idea y esto es lo que se pone en práctica. Podemos acercarnos a la definición de la buena enseñanza argumentando “que es aquella que enseña bien algo bueno, tanto en el sentido epistemológico de la acepción, como en un sentido ético-social y personal” (Silvina Gvirtz y Mariano Palamidessi, 1998), si el educando obtuvo un aprendizaje y lo comprendió es posible que este lo ponga en práctica, como sabemos el concepto de enseñanza (dar algo) y el concepto de aprendizaje (adquirir algo) van de la mano, ya que si no hay una enseñanza, no existe un aprendizaje.

Desde mi punto de vista y a lo que mi experiencia como estudiante normalista me ha permitido vivir como futura docente, para mí, una buena enseñanza es aquella que deja un aprendizaje que jamás será olvidado, es ese conocimiento que te hará reflexionar, comprender y desarrollar algo. Entonces, “¿Qué es, en definitiva, la buena enseñanza? Es algo que los que trabajamos en la educación debemos descubrir, construir, experimentar” (Silvina Gvirtz y Mariano Palamidessi, 1998).

Así como varios cosas necesitan de algo para llegar a su objetivo, “La buena enseñanza” necesita de dos cosas para lograrse: Cómo enseñar y maestros competentes.

Si bien nos damos cuenta y retomamos lo anteriormente visto y analizado, el “¿cómo enseñar?” es algo importante para lograr un aprendizaje significativo en los alumnos. Es por eso que “para algunos autores, entre los que se encuentran Johnson (1967), Ausubel (1968) y Novak (1982), los aspectos curriculares y los aspectos instruccionales constituyen dos capítulos relativamente independientes que deben abordarse por separado; el currículum se ocupa únicamente del qué enseñar, de tal manera que, una vez definidos y secuenciados los objetivos y contenidos de la enseñanza, se plantean las cuestiones instruccionales relativas a la manera más adecuada de enseñar con el fin de asegurar el logro de los objetivos y el dominio de los contenidos” (Coll César,1997), lo que quiere decir que aquel maestro que no tiene bien planteado sus objetivos y no domina bien el tema, no logrará una enseñanza, y por tanto, no se generará un aprendizaje.

Dentro del proceso de aprendizaje existen tres aspectos interrelacionados a resaltar, que son: el qué enseñar, el cuándo enseñar y el cómo enseñar, por lo tanto es ilógico que cada uno de estos aspectos sea tratado individualmente, pero esto

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (8 Kb)
Leer 5 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com