EL TRABAJO CON PROYECTOS CONFORME A LA REFORMA INTEGRAL DE LA EDUCACIÓN BÁSICA EN LA ASIGNATURA DE ESPAÑOL

La creación del término de proyecto y sus bases fundamentales son atribuidas al Pedagogo estadounidense William Heard Kilpatrick en un intento de llevar a la práctica las teorías de J. Dewey, quien afirma que la experiencia activa el pensamiento y este, a su vez, actúa sobre aquella y la reorganiza, originando así un aprendizaje significativo.

Es por esto que Kilpatrick oriento el trabajo para tratar de desarrollar la actividad infantil en un medio natural sin una guía estricta de trabajo, sino más bien que ésta fuera surgiendo según el desenvolvimiento de las actividades y el interés de los sujetos, despertando con esto la iniciativa de los alumnos.

El Diccionario de las Ciencias de la Educación define un proyecto como “una actividad previamente determinada cuya intención dominante es una finalidad real, que orienta los procedimientos y les confiere una motivación”.(12)

Entendiendo con esto que desempeñan la función de hacer activa la adquisición de los conocimientos y habilidades necesarias para la vida, englobándolos en una serie de estrategias que conforman el plan de trabajo permitiendo atender diferentes aspectos que se vinculan con los aprendizajes, las relaciones entre el docente y el alumno, la organización de actividades y los intereses educativos en general, encaminado todo esto a cubrir las necesidades que surgen al intentar resolver problemas con el objetivo de comprender y mejorar la realidad.

Podemos asumir entonces, que fueron las características particulares de este método de trabajo lo que motivó su uso dentro del Plan de Estudio. Puesto que se espera que con ellos se planifiquen las actividades involucrando series de acciones que generen reflexiones coordinadas e interrelacionadas en pro de alcanzar los aprendizajes esperados para que de este modo se desarrollen plenamente las competencias comunicativas que menciona el enfoque de la asignatura.

Orientando al docente a planear los recursos materiales que empleará y la dinámica de participación que propiciará en los alumnos procurando la colaboración de todos ellos en el aula de manera tal, que las actividades se distribuyan para realizar aportaciones, tanto individuales como en pequeños grupos, completando en su conjunto el proyecto de clase.

Al desarrollarlos durante mi práctica intensiva pude darme cuenta de la exigencia del trabajo colaborativo que supone una estrecha relación con las prácticas sociales del lenguaje. Como se mencionó anteriormente, los proyectos programados en el plan están comprendidos en tres ámbitos entorno a los cuales gira la temática central de los mismos y se posibilita una mejor integración del trabajo escolar con las diferentes actividades de la comunidad para lo cual, se pretende difundir los productos finales predominantemente en el periódico escolar o en asambleas cívicas según sea el caso y la necesidad.

Como bien menciona Renzo Titone, sin que éstos representen un orden riguroso de seguimiento, las diferentes actividades realizadas en los proyectos se dividen en cuatro momentos que el autor denomina: 1. La intención; 2. La preparación; 3. La ejecución y 4. La apreciación.

Cada uno supone para el maestro y para el alumno, según sea el caso, una serie de actividades encaminadas al desarrollo total del proyecto cumpliendo así los propósitos planteados en éste. Sin embargo, manteniendo una intencionalidad similar, el plan de estudio concibe cuatro elementos fundamentales para el desarrollo de los proyectos en correspondencia a los momentos mencionados por el autor. Éstos se enlistan y describen a continuación.

Propósito

Es bien conocido por todos que no puede existir una actividad educativa ni de cualquier tipo sin la presencia, al menos implícita, de un propósito que marque y ponga en claro la finalidad de dicha actividad. En el caso de los proyectos que se desarrollaran en la asignatura de Español, éste refleja los elementos de las prácticas sociales del lenguaje en los que se espera el niño sea competente. Además, el producto final que se desea obtener es también el título del proyecto. Tal es el caso del primer proyecto del segundo bloque “¡Organicemos una fiesta!”, cuyas actividades principales encaminan tanto al docente como a los alumnos no solo a la preparación de un convivio, sino también, a su ejecución y disfrute. A mi parecer esto ayuda en gran parte a mantener siempre a la vista el objetivo guía de las actividades, y en mi experiencia como docente, a no abandonar el camino de los aprendizajes esperados ni los aspectos comunicativos que se esperan alcanzar dado que esto puede desproveer al proyecto de su esencia, llevándolo al fracaso o dejándolo inconcluso por la pérdida a de interés.

Actividades a Desarrollar

Se pretende que las acciones a realizar durante la puesta en práctica de cada uno de los proyectos propuestos en el Programa propicien situaciones en las que el alumno participe en la práctica social del lenguaje centralizando sus aprendizajes de tal manera que se le haga notar su capacidad de responder y actuar ante circunstancias cotidianas similares a las que ha vivido en la escuela a través de los proyectos. Dadas estas características, se asegura el favorecimiento de las competencias comunicativas y el alcance de los aprendizajes básicos.

En el entendido que se intenta proporcionar al niño experiencias apegadas a la realidad en que se encuentra. Se prepondera el uso de textos que verdaderamente podrá encontrar y utilizar posteriormente para resolver problemas o satisfacer necesidades, sean escolares o no. Tal es el caso del proyecto titulado “El foro de expertos” donde, con la debida orientación, buscan información acerca de un tema de interés discriminando en el proceso los textos o fuentes que les proporcionen datos irrelevantes o de poca importancia. Esto les marca la pauta, de haber cumplido plenamente el propósito según el enfoque, para que puedan volver a realizar el mismo procedimiento en una situación diferente, dado un tema que le sea interesante o necesario investigar. Asimismo en el proyecto “Desfile de oficios y profesiones”, se motivó a los niños a averiguar acerca de los diferentes actividades comerciales con los que cuenta la comunidad y a conocer a las personas que los ofrecen, lo que posteriormente le servirá para cubrir una necesidad que le surja ya sea para solicitar, o para prestar un servicio determinado.

Como es de esperarse, como maestros encargados de orientar al niño en la producción de sus primeros textos, no es posible dejar de lado la revisión ortográfica, de redacción y demás menesteres incluidos en el correcto uso del lenguaje para la comunicación efectiva. Sin embargo,

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