Pensamiento y lenguaje

Pensamiento y lenguaje

El pensamiento ha sido objeto de  múltiples estudios basados en las distintas corrientes psicológicas y lingüísticas, cada una de ellas realiza un constructo desde su propia perspectiva,  dándole un significado, utilización y organización  particular.

• El conductismo: “solo da importancia a lo que se puede ver y medir” (Papalia), con esta concepción es evidente el punto de vista mecanicista y reduccionista que presenta la corriente experimental, que solo atribuye las interacciones en el medio ambiente de un sujeto que aparentemente es pasivo y que no es capaz de realizar procesos mentales superiores; es decir solo opera cuando recibe estímulos externos, lo demás no se puede medir por lo que no tiene mayor relevancia.

• El cognitivismo: Es la contra parte del mecanicismo, ya que da relevancia  a que” hoy en día el estudio de las actividades mentales no solo es importante, si no también posible” (Papalia).

Si bien es cierto que los procesos mentales que subyacen en nuestra cognición nos permiten poder aprehender técnicas instrumentales y desarrollar variadas capacidades (las cuales se trataran mas adelante), también es cierto que son de una difícil medición, pero esto no es un impedimento para llegar a un consenso de que los procesos que implican el desarrollo de nuestro pensamiento y lenguaje deben de ser estudiados, ya que esta demostrada su importancia significativa en el desarrollo integral cognitivo del individuo.

Al hablar de “un medio de comunicación que expresa significados específicos organizado por reglas” (Papalia), hace referencia a la ciencia que estudia el lenguaje que es la lingüística, de ella se pueden entender y analizar las unidades mínimas (fonemas, morfemas), reglas sintácticas, semánticas, que se incluyen en un concepto más general que es la gramática. La lingüística también se preocupa de su origen, adquisición y desarrollo; si específicamente se ve el desarrollo se puede indicar que aparentemente la capacidad innata de evolución del lenguaje esta determinada por una carga genéticamente programada.

Al igual que el desarrollo cognitivo, el lenguaje también pasa por etapas, donde se van adquiriendo distintos logros determinados por la madurez física y cognitiva del infante, no obstante la afectividad y la interacción con el ámbito psicosocial también son determinantes en su desarrollo.

El lenguaje y su adquisición presentan discrepancias significativas en los distintos enfoques teóricos que van desde la posición netamente observable y comprobable mediante refuerzos del condicionamiento operante, a el modelado imitativo de Bandura, o la posición nativista de Chomsky. A pesar de las divergencias, es evidente que el desarrollo y adquisición del lenguaje” se da en la relación activa del niño y su educador” (Papalia en lenguaje maternal), este debe contribuir en la estimulación temprana para un normal desarrollo que siempre es positivo, por lo que los diferentes estilos comunicativos hacia los infantes favorecen notablemente el desarrollo del lenguaje; con ello queda descartada la posibilidad de de su evolución  normal en un ambiente privado de estímulos afectivos y socializadores.

Si se habla de lenguaje, es necesario retomar el concepto de pensamiento que quedo depositado en la primera parte de este ensayo; ambos términos se encuentran intrínsecamente ligados por lo que es difícil especular cual es el que determina al otro. Lo que si es evidente es que el lenguaje “proporciona un sistema de signos que permite etiquetar personas, lugares y situaciones” (Papalia definición de lenguaje), que según mi criterio son identificados, organizados, relacionados y estructurados en nuestra cognición; es decir nuestro pensamiento que a su vez se relaciona con un sustrato que no es menos importante, me refiero al factor sociocultural. La formación de conceptos en esta instancia, es de significativa importancia, ya que con ellos podemos interpretar y clasificar la información que proviene desde un contexto. (Facilitan el razonamiento si están bien o mal definidos).

Otra característica importante de nuestro pensamiento es la capacidad para resolver problemas; como los temas anteriores, también son vistos desde perspectivas teóricas que son divergentes en sus puntos de vista. Dicho esto, considero más relevante el enfoque del “procesamiento de la información” (Papalia, en la resolución de problemas), que plantea etapas bien definidas y de relevante valor al enfrentarnos a una determinada situación, estas son:

• Preparación
• Producción
• Evaluación

Estas etapas corresponden a mecanismos internos que se relacionan con los procesos cognitivos, y ayudan a percibir, relacionar y almacenar la información  configurando nuestro pensamiento; mediante “estrategias algorítmicas y heurísticas”. (Papalia en procesamiento de la información).

Para finalizar, la creatividad, como capacidad para poder ver las situaciones desde diferentes perspectivas, permite al individuo poder solucionar problemas mediante una forma más simple y directa; esta es una herramienta que intenta desprenderse de metodologías cerradas y sistemáticas para pasar a ver una situación en varias dimensiones,  encontrando mas caminos o posibles alternativas de solución a un mismo problema; con ello me refiero al “pensamiento convergente y divergente”(Papalia en resolución de problemas).

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