Mismidad y Otredad

Mismidad y Otredad

Fernanda Cayón Arrioja

Luz Maria Becerra

Literatura, Cine y Persona

14 de mayo de 2015

“Existe una problemática referida a la subjetividad y a la subjetividad consigo misma, la mismidad, que conlleva la cuestión del Otro, espejo de lo propio, lo individual que retorna en uno mismo como reflejo.”  [1]

El problema al cual nos enfrentamos según Gregorio Kaminsky es reconocer la existencia de otro, la otredad no implica que el otro deba ser discriminado, por el contrario, es aceptar lo que es diferente a mi.

Lo más común es que la otredad se construya a partir de la oposición: el otro es aquello que nunca fuimos, no somos y no seremos, incluso lo que no queremos ser.

Por ejemplo en la lectura de Jorge Luis Borges  “El otro” ,se narra un acontecimiento que, estando él en Cambridge, en febrero de 1969, encontró sentado en un banco a un joven a quién reconoció como a él mismo, que aseguraba encontrarse en Ginebra, en 1918.

El narrador  Borges mayor  y “el otro”  Borges joven, construyen la narración. Ambos se encuentran a orillas de un río  que los une y los separa: Borges mayor intenta convencer al joven de que ambos son la misma persona, aunque estén separados por medio siglo de vida. Para demostrárselo, le cuenta cosas que sólo uno mismo sabe y después le explica el camino que tomará su vida  en el mundo en los años siguientes. El joven, por su parte, pretende convencerse de que este encuentro no es más que un sueño; expone sus ideas sobre la literatura y la sociedad, que corresponden a las que Borges tuvo en la juventud y de las que tanto se alejó.

Jorge Luis Borges elabora en “El otro” un ejercicio de introspección valiéndose de un engaño, el cuento fantástico, que le permite reencontrarse consigo mismo: con la persona que fué medio siglo más joven.

Cuando se habla de “el otro”, no necesariamente existe una referencia precisa o particular a una persona; “el otro” es nuestro entorno, los individuos que nos rodean, el resto de la sociedad. Como seres vivos que ocupan un pequeño espacio en la superficie de un planeta habitado por miles de millones de individuos, tanto animales como vegetales.

Otra de las cuestiones de la problemática que habla Gregorio Kaminsky es la mismidad que está muy relacionada con la mismidad que se define según Emma Ruiz Martí del Campo como “El resultado del encuentro de los impulsos primitivos del ser humano, con las exigencias de su entorno social. Hablar de la subjetividad es hablar de la condición de los sujetos, de su índole, de sus peculiaridades, de aquello que los delimita y distingue del mundo de los objetos” [2]

En mi opinión las experiencias pueden ser gratificantes o no. Cuando hablamos de experiencias estamos haciendo referencia a las experiencias familiares, laborales, espirituales, enriquecedoras, dolorosas etcétera. En cualquiera de las situaciones mencionadas, la experiencia depende de cada persona, lo individual, lo propio y personal, lo diferente del otro, que nos distingue y caracteriza esa es la mismidad. Por lo tanto la mismidad y la otredad están unidas, ya que al aceptar que somos únicos e irrepetibles con experiencias diferentes estamos formando una subjetividad, pero al mismo tiempo no somos nada sin el otro por que es lo que nos complementa.

El problema al cual hoy nos enfrentamos es que la sociedad ya no tiene percepción del otro, y no le interesa conocerlo. Vivimos en un  inmoral crecimiento de pobreza, muerte evitable de millones de niños por ausencia de una atención médica adecuada, persistencia de la guerra como medio de resolución de conflictos, destrucción del equilibrio ecológico de la biosfera.

Por ejemplo la película de Haeven (In a better world), Cuando Antón tiene un enfrentamiento con un extraño en la ciudad, el les enseña a los niños que no deben recurrir a la violencia, pero Christian está dispuesto a reaccionar. Antón piensa en una manera de enfrenar la situación según su criterio y las experiencias vividas es decir su subjetividad, ya que el vive dos mundos completamente diferentes por un lado trabaja como médico en una zona de guerra de África , el tratamiento de las víctimas de una milicia asesina y en Dinamarca, tiene dos hijos y un matrimonio roto. En esta película se puede observar perfectamente el problema que tenemos como sociedad, los políticos en África abusan de las mujeres, por que no les importa, no las reconocen como personas, si no como objetos que no merecen respeto. No tienen conocimiento de la otredad y tampoco piensan que cada persona es única e irrepetible ya que si lo hicieran no habría violencia en contra de la humanidad.

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