El Diario De Clase

El autor destaca en la siguiente lectura, de forma reflexiva y con ejemplos prácticos, la importancia de escribir y utilizar los Diarios, tanto en el proceso de formación profesional como de investigación cualitativa de la práctica diaria.

Aborda el tema de los diarios, desde los siguientes puntos de vista:

* El diario en el contexto de los documentos personales y de los materiales autobiográficos.

* El diario como instrumento de análisis del pensamiento de los profesores.

* Salvaguardias metodológicas en la investigación con diarios.

Y es a partir de estos tres puntos donde empieza a desglosar el contenido de este. En primer lugar retoma el término documentos personales y los refiere básicamente a las biografías, autobiografías, historias de vida y diarios como recursos de la investigación científica que a través de la historia han favorecido a las distintas parcelas del saber social como lo son: la historia, la sociología, la pedagogía, la psicología y la antropología. Por lo que considera a estos como una estrategia metodológica que se centra en analizar situaciones concretas, y plantea que desde esta visión surge una percepción subjetiva de los actores cuya interpretación se sitúa en el marco de los datos objetivos que el propio documento proporciona, sustentado en reconstruir realidades y experiencias individuales o colectivas. De la misma forma se apoya en algunos autores y menciona la relación entre las investigaciones cuantitativas y cualitativas, lo empírico frente a lo subjetivo y la forma como pretendemos conocer el objeto de estudio de lo individual sin llegar a generalizarlo. Concluyendo que lo más importante antes de adecuar un método es tener conocimiento del contexto y poseer claridad frente al problema y el propósito de la investigación.

En segundo lugar plantea que el sentido del diario es convertirse en el espacio narrativo de los profesores el cual permite que reflexionen frente a su propia actuación en la clase y la perspectiva personal desde la que la afronta. Traza también las diferentes formas como los profesores elaboran este y considera que es un documento que requiere un esfuerzo narrativo, de dedicación y constancia. Finalmente plantea como el diario de campo favorece la labor del maestro en su discurso práctico y su quehacer profesional. Y destaca como la narración se constituye en reflexión; practica trascendental en la formación docente.

En tercer y último lugar se refiere de modo explicito a dos tipos de salvaguardias, por un lado las salvaguardias técnicas y por el otro las salvaguardias de contextualización pragmática.Respecto a las primeras relata que se centran, sobre todo, en la validez de los diarios, no en lo que muestran sino lo significativo del contenido y en su proceso de elaboración. Al igual cómo estos usados como herramientas investigativas tienen un sentido de procesos

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