Aguacates Juan

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Conducta Organizacional

Prof.: Cándido Mercedes

Reporte de Lectura[pic 4]

El Pez que no Quiso Evolucionar

Autor: Paco Muro

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Realizado por:

Carolyn Valenzuela Hughes

ID: 1035228

Reporte de Lectura:

El Pez que no Quiso Evolucionar [pic 7]

Introducción:

La globalización ha traído consigo la competitividad inminente entre las empresas. De ahí, que la innovación, calidad, sistemas eficaces y sobre todo el talento humano son elementos fundamentales para posicionarse como líderes en el mercado.  

El pez que no quiso evolucionar es un libro de diferentes relatos que nos ayuda a reflexionar sobre diferentes puntos para mejorar el comportamiento directivo y lograr el mayor rendimiento de las empresas a través del cambio de mentalidad y puesta en marcha de una dirección exitosa.

Análisis de Lectura:

El autor Paco Muro nos muestra como la globalización, ha creado mayores cambios en la forma de dirección de las empresas. Lo constante a través del tiempo siempre ha sido el cambio. Las empresas de hoy, no deben culpar a la suerte de sus fracasos. Los directivos deben ser capaces de evaluar el entorno y visualizar cómo los cambios y las nuevas exigencias del mercado dejan atrás los viejos paradigmas. La gerencia de hoy debe ser capaz de liderar los cambios, tal y como la tortuga, que congregó  a la comunidad marítima para divulgar los cambios que vendrían acerca  del nivel del mar. Esta tortuga fue liderando las medidas alternas para con tiempo adecuarse al cambio que había de venir y sobrevivir a ellos.

Para evolucionar y mantenerse compitiendo en el mercado de hoy, los directivos deben anteponerse a los momentos de escasez y no mantenerse paralizados con la forma acostumbrada de hacer las cosas. Los responsables de tener éxitos somos nosotros mismos.

En el mismo sentido de la evolución de las empresas, es fundamental trabajar en estrategias a largo plazo, donde la calidad, enfoque a cliente y la inversión a medida sean los principales pilares. No es rentable solo disminuir recursos para alcanzar los objetivos, los talentos o bien “capacidad operativa”, tal y como describe el autor, son el mecanismo fundamental para alcanzar la ventaja competitiva ya que son los protagonistas tanto de la creatividad como de la innovación que se necesita para alcanzar y maximizar los resultados esperados.  

Muchas empresas constan de un gran potencial humano, que individualmente son excelentes;  sin embargo, por si solos nunca lograran el objetivo común. La ventaja competitiva de una empresa debe ser liderada por un directivo “un chofer de auto”, que se mire así mismo en el espejo, entienda las oportunidades existentes, esté dispuesto a mejorar y cambiar, y encamine a los recursos en la innegable constante del cambio,  ya que lo que hoy funciona, no necesariamente lo hará mañana. Siempre como directivos debemos estar  abiertos a nuevas formas de hacer las cosas, nuestras estrategias y nuevos sistemas para evitar el ineludible y posiblemente descenso gracias a los rápidos cambios del negocio de hoy.

Según el texto, es importante valorar la experiencia de los colaboradores ya que ellos han sido exitosos y han fracasado durante años, lo que les da un alto grado de conocimiento de los sistemas y del negocio. Los que tienen más tiempo en la empresa son, muchas veces, objeto de reducción de costos; sin embargo, la ganancia de este tipo de reducción se traduce a la larga en menor competitividad ya que se intercambian recursos valiosos y experimentados, cuyas alto rendimiento compensan sobradamente lo de los nuevos y jóvenes recursos. Existen varias alternativas pautadas por el autor para retener recursos experimentados cuya experiencia y comportamientos sean beneficiosos, algunas de ellas son: retener a los que posean mayores conocimientos y proporcionen mayor aporte, utilizar a estos talentos para formar nuevo personal, retener a los talentos con mejor manejo y relación con los clientes externos, etc.

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