El Pequeño Cerdo Capitalista

INTRODUCCIÓN

El dinero es el centro del mundo aunque muchos digan que no compra la felicidad es indispensable para la misma “ESTABILIDAD”.

Al paso de los años se nos enseña a manejar el dinero y lo que compramos con ello ya que es básico y lo aprendemos con rapidez ya que comenzamos a juntar cosas que poco a poco nos dejan el gusto por consumir cada vez más.

El manejo del dinero lamentablemente no se nos enseña en la escuela, desde que comenzamos a tener dinero se nos debería enseñar cómo ahorrar, gastarlo, invertirlo y manejarlo.

A lo largo de la vida necesitamos cada vez más el dinero, para mantener un hogar, pagar gastos, etc, asi que si aprendemos a administrarlo bien nos será de gran ayuda.

Nunca es tarde para enseñarnos a ahorrar, no es necesario estar estudiado o ser una persona de gran capital monetario, todos podemos administrarnos de diferentes formas.

Este libro nos enseña las herramientas para poder ahorrar nuestro dinero, ya que la autora explica cómo funcionan las herramientas financieras, los seguros, las hipotecas, los préstamos, las anualidades, las tarjetas de crédito, etcétera.

DESARROLLO

El pequeño cerdo capitalista es un libro en el cual se introduce el interés para ahorrar y saber cómo y en que gastar el dinero de una manera correcta, sin importar la clase social, la educación o religión..

Si con nuestros salarios o nuestras entradas de dinero nos supiéramos economizar la cultura de México cambiaria, incluso quizá y seriamos un mejor país económicamente estable.

Son 9 capítulos que nos ayudan a saber más acerca de la optimización del dinero, no solo del dinero a nivel mayor sino desde el dinero que percibimos diariamente.

Explica en que consiste el ahorrar, que pasos seguir para hacerlo, el tener un ahorro es una meta que debe fijarse ya que nos podrá sacar de algún imprevisto, pero también de lo que pasa en los bancos al ahorrar, nos habla también de los afores y sus retiros, seguros y demás.

Algo que llamo mi atención fue que menciona que cuando éramos niños nos dolía gastar nuestro dinero en darnos un gusto, y que aunque fuera poco pensábamos mas en que lo queríamos gastar.

El recibir un sueldo nos hace automáticamente gastarlo en alguna necesidad tonta ay eso nos impide ahorrar aunque sea una módica cantidad, a mayor cantidad de dinero son más las ganas de comprar cosas caras aunque no nos sean de utilidad pasando algún tiempo o solamente ir actualizando nuestras pertenencias conforme avanza la tecnología, en lugar de invertirlo en algo bueno o en algún fondo de ahorro en un banco.

Nos dice que al comprar cosas sin pensarlo antes es una mala inversión ya que a lo mejor ni siquiera lo necesitábamos, quizá y los productos con “ofertas” son un gancho de las empresas para hacer gastar a las personas y en mi caso funciona muy bien aunque no del todo, ya que si no veo uso del producto días después de comprarlo me arrepiento demasiado.

Si no se tiene un objetivo al ahorrar no importa ya que ese dinero extra se puede utilizar en algún momento de necesidad o de carencia que tengamos derivado a algún problema o simplemente nos facilitara el enganche o la compra de algo para nuestro beneficio.

En este caso se puede abrir en algún banco una cuenta de inversión, como no se tiene en que se va a gastar es mejor mantenerlo guardado con la posibilidad de que esto nos genere más dinero a largo plazo.

Nos hace tomar conciencia acerca de en qué nos gastamos el sueldo que ganamos cada semana, ya que asi como llega, asi lo gastamos; la autora nos da ideas de cómo administrar el dinero separando los gastos que tenemos frecuentemente y gastos que tenemos por “gusto”.

Recomienda hacer un ahorro contemplando la

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