INTELIGENCIA EMOCIONAL (Daniel Goleman)

[pic 1][pic 2][pic 3][pic 4]

INTELIGENCIA EMOCIONAL

(Daniel Goleman)

La inteligencia emocional (IE) es una herramienta imprescindible para comprender los panoramas de la productividad de las personas en el ámbito laboral, el éxito de las empresas, del enriquecimiento del liderazgo y de la prevención de conflictos. Harvard califica a la IE como un concepto revolucionario, una noción arrolladora y más influyente en el mundo empresarial.

Desde el punto de vista del trabajo en equipo, las emociones y los estados de ánimo pueden parecer triviales, sin embargo, tienen importantes efectos; los estados de ánimo (positivos o negativos) influyen en la manera de percibir los hechos y las personas, de ahí que la capacidad del líder para inducir un estado de ánimo positivo y cooperativo resulta fundamental para determinar el éxito del grupo.

El líder es la persona que tiene como misión motivar, guiar, inspirar, escuchar y persuadir al resto de los miembros de un grupo. Generalmente son personas movilizadoras que despiertan el entusiasmo y alientan lo mejor que hay en las personas, es decir, son personas que  mantienen autodominio de sus emociones.

Daniel Goleman defiende que con mucha frecuencia, la diferencia radica que el éxito de los líderes se debe a la inteligencia emocional, entre las que destacan el autocontrol, el entusiasmo, la empatía, la perseverancia y la capacidad de motivarse a uno mismo. Una parte de estas habilidades pueden venir en la carga genética de las personas y otras se adquieren a lo largo de los primeros años de vida. Existen diferentes investigaciones que comprueban que las habilidades pueden aprenderse y perfeccionarse si se utilizan los métodos y las condiciones adecuadas para desarrollarlas.

Desde una perspectiva biológica, el arte del liderazgo requiere de la adecuada combinación de inteligencia y emoción. No hay duda sobre la importancia del pensamiento analítico y de la claridad conceptual, no obstante, la capacidad intelectual, por sí sola, no hace al líder; éste debe alentar un clima de cooperación y confianza que sólo es posible mediante la inteligencia emocional.

Toda emoción constituye un impulso que moviliza a la acción, por ejemplo, basta con observar a los animales o a los niños pequeños para encontrar la forma en que las emociones los dirigen hacia una acción determinada, que puede ser llorar, sonreír, huir, etc., cada ser humano viene equipado con programas de reacción automática o predisposiciones biológicas a la acción.  Pero las experiencias y el medio en el que se desenvuelven las personas moldean esas características que irán definiendo las respuestas ante diferentes estímulos que se verá proyectado mediante emociones.

El orgullo de la capacidad para controlar emociones, ha caído en la trampa de creer que la racionalidad se encarga de los sentimientos y que a ella se puede atribuir la causa de todos los actos de los humanos, pero a diferencia de lo que se piensa, son muchos los asuntos que se manejan bajo emociones y se actúa sin siquiera consultar las zonas analíticas del cerebro. El ejemplo más claro es cuando ante una situación de conflicto se pierde el control ante alguien diciendo cosas que jamás se diría.

La vida emocional constituye un ámbito que se puede dominar con mayor o menor  habilidad. Existe el estereotipo de relacionar lo intelectual con la capacidad de razonamiento pero completamente no idóneo en el plano personal y quienes en cambio gobiernan adecuadamente sus sentimientos y saben interpretar y relacionarse efectivamente con los sentimientos de los demás, gozan de una situación ventajosa en todos los dominios de la vida, desde el noviazgo y las relaciones íntimas hasta la comprensión de las reglas que determinan el éxito en el ámbito profesional. Las habilidades emocionales no sólo nos hacen más humanos, sino que en muchas ocasiones constituyen una condición  de base para la proyección de otras habilidades que se asocian al intelecto, como la toma de decisiones racionales.

Los estragos del descontrol de las emocione en el mundo son más que evidentes. Basta con abrir un diario para encontrar consignadas las formas de violencia y de degradaciones que non parecen responder a ninguna lógica. Hoy por hoy no nos genera estupor escuchar que un corredor de bolsa se haya arrojado de un rascacielos tras una repentina caída de la bosa, que un marido haya golpeado a su esposa o que, tras haber sido despedido, un empleado haya entrado en su compañía armado y asesinar a varias personas.

Tradicionalmente se ha sobrevalorado la importancia de los aspectos racionales de la psiquis, en un afán por medir y comparar los coeficiente de inteligencia humana, sin embargo, en aquellos momentos en que las personas se ven arrastradas por las emociones, por ejemplo cuando un chico golpea a otro por burlarse de él, o un conductor le dispare a alguien por haberle cerrado la vía.

Todas las personas venimos al mundo con un temperamento determinado, los primeros años de vida tienen un efecto determinante en la configuración cerebral y, en gran medida, definen el alcance del repertorio emocional. Pero ni la naturaleza innata ni la influencia de la temprana infancia constituyen determinantes del destino emocional.

LAS 21 LEYES IRREFUTABLES DEL LIDERAZGO DE JOHN MAXWELL

Este libro está basado en leyes o principios universales del liderazgo que no caducan, siguen en vigencia por que en cada una de sus leyes manifiesta lo que los verdaderos líderes deben manejar para mantenerse y elevar su calidad ante el grupo de personas. El que una persona domine estas 21 leyes del liderazgo tendrá éxito hoy igualmente que una persona que los aplique en tiempo después.

Para construir el verdadero liderazgo, desarrolla los siguientes principios:

1- La Ley del Límite: La capacidad de liderazgo determina el límite del crecimiento de una persona. Es decir el límite de crecimiento como persona, en tu trabajo o negocio está determinado por tu nivel de liderazgo. Pues mientras mayor sea el liderazgo significará la eficacia de la persona. Sin embargo, una persona exitosa significa que es talentosa e inteligente, pero sin la habilidad de liderazgo, nunca llegarás lejos. Por eso es sumamente importante que para tener éxito en la vida debe enfocar a desarrollar habilidades de liderazgo.

...