Sexualidad
Enviado por chioo1 • 21 de Noviembre de 2013 • 2.977 Palabras (12 Páginas) • 278 Visitas
RESUMEN DE LIBRO “CONVERSACIONES CON SEGUIN” de MAX SILVA TUESTA
Introducción:
La publicación de este libro se dio por el septuagésimo aniversario de Carlos Alberto Seguín . Se estableció hacer libro en forma de una conversación ya que en ella se mantiene siempre abierta la posibilidad de confrontar y discutir varios temas.
Pero quien es Seguín, el fue el introductor de la medicina psicosomática en el Perú, organizo el primer Servicio de Psiquiatría en el Hospital General , fue el pionero de la psicoterapia en grupo, desarrolló la Psiquiatría folklórica, es el único medico peruano que figura como uno de los autores de la monumental Historia Universal de la Medicina.
Pero en este libro se quiere conocer a fondo que hay dentro de esta persona con un gran currículo vitae, en estas conversaciones se trata de relucir los rasgos más característicos de Seguín.
El término “generación” tiene cierto significado, en el siglo pasado en la psiquiatría peruana había solidaridad entre colegas, ahora en este nuevo siglo se instala una nueva psiquiatría individualista que muestra egoísmo hacia los colegas de su generación.
Hubo una etapa en la psiquiatría llamada “caudillista” término usado dando referencia al acaparamiento del poder en una persona, fue así que surgió Honorio Delgado, llego a ser el jefe de servicio del Hospital Larco Herrera. Bajo el magisterio de Honorio Delgado, en 1929 después de la muerte de Hermilio Valdizán, fue encargado de la cátedra de Psiquiatría en “San Fernando”. Así como todo un señor feudal, terminaría por gobernar la psiquiatría peruana, desde esos puestos y de los otros que fue conquistando en el transcurso del tiempo, quien fue llamado “sabio” a la edad de 30 años.
Nadie podía refutar lo que él decía, como se dijo llamar “el era la psiquiatría”. En estas épocas hubo problemas en la Faculta de Medicina, el alumnado reclamaba incorporar buenos profesores a sus aulas y expulsar algunos docentes mediocres. Y uno de los profesores más solicitados era Carlos Alberto Seguín, el pertenecía a la plana docente pero tuvo que renunciar por razones que se darán a conocer en este libro. Una comisión se la Asociación Neuropsiquiatría de Estudiantes de Medicina fue a pedirle a Honorio Delgado a incorporarlo, pero él se negó bajo la escusa que “no dependía de él”.
Según versiones oficiales el distanciamientos de Seguín y Delgado surgió porque ambos representaban doctrinas contrapuestas. Seguín fue el único psiquiatra que no estuvo de acuerdo con él en diversos temas, los devotos de Delgado consideraban una ofensa a la psiquiatría tal hecho. Seguín fue único que lucho contra aquella marginación de esa época de “caudillismo y marginación profesional”.
Después de la segunda colisión de profesores y alumnos en San Fernando, la mayoría de los profesores renunciantes abandonaron San Fernando y fundaron “Cayetano Heredia”. Entonces después de este suceso se comenzó una nueva organización en San Fernando. Seguín se reincorpora a San Fernando en 1961. En ese entonces Seguín era líder de un pequeño grupo de psiquiatras del Hospital del Obrero.
Para desarrollar una doctrina pedagógica, además de competencia y voluntad había que obtener poder, y no bastaba con prestigio sino muchas otras cosa para lo cual Seguín estaba negado. Lo que la comienzo fue mucho movimiento de vida institucional se volvió algo mas considerable. Según los adversarios de Seguín ellos hacían la revolución no él. Así fue como Seguín entro en este “combate” pero el error que cometió Seguín fue jugar limpio.
De la Intimidad y sus elevados muros:
En este capítulo se muestra como Silva Tuesta y Seguín comienzan esta “conversación” citando a filósofos , psicoanalistas (Freud) , sobre la relación entre los entrevistados y los entrevistadores, sobre la intimidad que se expone al acceder a dar una entrevista , el poder que tiene el entrevistador , y como el entrevistado deja salir un poco de su “intimidad”. Así procediendo a continuar con esta “conversación”, sin antes citar las palabras dichas por Seguín al término de este capítulo:
“Tratare de ser lo más sincero posible, aunque – siempre ocurre con la sinceridad- ello me haga sufrir o hiera mi ego. Creo que un dialogo de esta clase me servirá para ponerme en contacto con mi Yo. A través de los años vamos evolucionando y necesitamos detenernos un momento para obtener una visión del camino que hemos recorrido y, de esa manera, saber lo que somos y donde estamos. Si no lo hacemos, nos dejamos llevar por la vida y, en cierta forma, perdemos conciencia de nosotros mismos.”
La vida (I):
En este capítulo se trata de inspeccionar en la vida de Seguín, conociendo desde sus tatarabuelos, bisabuelos y sus padres. Y como en cada generación existió un dato curioso (como que su bisabuela doña María del Pilar Figueroa era hermana del presidente, lo cual Seguín nunca intento verificar) o ya de por si datos históricos de esas épocas. Se habla mucho a petición de Max Silva Tuesta de los padres de Seguín, como Seguín recuerda a su padre como un hombre cordial, alegre de cuerpo sano y de espíritu y lleno sobre todo de “idealismo extremo” que constante mente lo llevo a luchar.
Cuenta también Seguín como fue que su padre fue expulsado de Perú a Bolivia por el presidente de ese entonces Leguía; el padre de Seguín, Alberto Gonzales no estuvo de acuerdo con su dictadura. Después de su destierro su padre regreso al Perú ilegalmente disfrazado de cura pero fue traicionado, luego de esto fue llevado a Taquila, ubicada en un islote del lago Titicaca estuvo ahí por 10 meses, donde conoció al Mayor Gustavo Jiménez, con quien entablo una amistad.
También habla de su madre, lo engreidora que era con él, pero que no impedía que le diese una buenas nalgadas cuando lo mereciese.
Max Silva Tuesta debate con Seguín sobre el absurdo interpretativo, en base al sobre-idealismo que tuvo su padre. También hablan sobre la fantasía de Seguín en la cual el escala una montaña pero antes de llegar a la cima despierta, lo que él interpreta como el alcanzar de un “ideal” lo cual si lo alcanzase ya no sería un ideal, y también de las sensaciones de Seguín de ya no estar en condiciones para hacerlo. Como las interpretaciones que tiene la palabra “viejo” tienen diferentes significados y como sobre todo siempre es usado despectivamente.
Seguín recuerda fragmentos de su libro “Tu y la Medicina”, como evitar el miedo a la muerte de los enfermos. Cuenta las experiencias cercanas a la muerte que tuvo y como las supero sin angustiarse ni perder el control de sí mismo, y que estas acciones fueron las que lo salvaron. A
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