CAPITULO I “LA FUNCIÓN DE LA ENSEÑANZA”
Enviado por Marina Gonzalez • 19 de Octubre de 2016 • Apuntes • 1.449 Palabras (6 Páginas) • 1.668 Visitas
“Crecer y pensar” – Juan Delval
CAPITULO I “LA FUNCIÓN DE LA ENSEÑANZA”
Ressumen
La etapa de inmadurez
En el hombre el tiempo en que el niño depende del adulto tiene larga duración, por lo que requiere que se lo cuide y enseñe. Cuando nacen los seres humanos poseen algunas conductas simples, y durante la infancia y adolescencia va a ir construyendo dentro de un medio social determinado, su inteligencia y conocimientos, van acumulando una experiencia extragenética que constituye la cultura, que es lo que se transmite durante la etapa de desarrollo (infancia y adolescencia).
El proceso de socialización
El desarrollo humano no es concebible sin la existencia de una sociedad. Desde el nacimiento el niño es influenciado por la sociedad en la que vive, adquiriendo sus conductas, al aprender a comportarse como los adultos, su lenguaje y su cultura.Esta socialización primaria es un proceso inconsciente.
La educación
La transmisión de la cultura que las generaciones adultas realizan a los jóvenes en cada sociedad es lo que se denomina educación. La educación tiene un papel conservador (porque los adultos preparan a los jóvenes lo más iguales a ellos), para mantener el orden social, haciendo que la sociedad cambie lo menos posible con el suceder de las generaciones. Sin embargo, las sociedades cambian, por factores económicos, tecnológicos y científicos lo que se refleja en la educación.
La función de la escuela
Podemos imaginar que mientras los conocimientos que tenía que adquirir un individuo eran pocos, y comunes a todos los individuos de una sociedad, su socialización se realizaba por simple contacto con otros adultos. Pero cuando en esa sociedad se empiezan a acumular conocimientos y se produce una división progresiva en las funciones de los individuos empieza a ser necesaria una transmisión de saberes determinados, así surge la escuela. A esas escuelas primitivas sólo asistían unos pocos, los funcionarios o sacerdotes, se ejercía un control muy estricto sobre esos depositarios del saber pues éste era claramente una fuerza social que había que preservar y además se pensaba que era perjudicial extenderla. La mayor parte de la población estaba totalmente alejada de ese saber acumulado.
Con la llegada a la Edad Moderna la ciencia experimentó un desarrollo muy considerable y en el siglo XVIII, la Ilustración introdujo la idea de que todos los individuos eran originalmente iguales y que la enseñanza debía estar al alcance de todos. La Revolución Francesa intentó llevar a la práctica algunas de las ideas de la Ilustración, pero de hecho no se logró entonces porque muchas de esas ideas no respondían a las necesidades sociales del momento. De todas formas, a finales del siglo XVIII muchas voces se alzaron, sobre todo en Francia e Inglaterra, a favor de implantar una enseñanza institucionalizada para todos.
La enseñanza obligatoria
La implantación de la enseñanza obligatoria y gratuita para todos es algo que se empieza a introducir en el siglo XIX, presenta dos facetas: por una parte es el resultado de las demandas de educación de capas cada vez más extensas de la sociedad, pero por otro es un producto de la disminución de necesidades de mano de obra infantil en las fábricas.
Con la revolución industrial se utilizó una gran cantidad de mano de obra infantil, pero el aumento del maquinismo hizo innecesaria la misma.
El desarrollo de las escuelas aparece, estrechamente ligado al descenso de la necesidad de mano de obra infantil en las fábricas y al peligro que supone y los problemas que conlleva el mantener a grupos de niños y adolescentes desocupados durante todo el día, para evitar que estuvieran en la calle y se convirtieran en vagos y/o delincuentes, mientras sus padres trabajaban en las fábricas.
Que los niños estén en las escuelas no sólo no era perjudicial para el mantenimiento del orden social, también era beneficioso para enseñar el respeto al orden establecido y a los valores dominantes. La clase dominante va a educar a los hijos del proletariado para aprender la obediencia desde temprano. Esta élite decidía qué se necesitaba, y cómo debían aprender los niños. Los conocimientos ocupaban un lugar mínimo y estaban subordinados a la transmisión de valores.
Los dos objetivos de la escolarización obligatoria coexisten a lo largo de toda la evolución de la escuela obligatoria, el ideal ilustrado de la escuela como institución liberadora proporcionando el saber para todos, y la escuela como órgano que sirve para mantener el orden social existente. La escuela es una institución contradictoria (conservadora/transformadora) aunque lo que predomina es el papel de mantenimiento del orden social.
La evolución de la escuela
Hacia finales del siglo XIX, la insuficiencia de la escuela existente en aquel momento para satisfacer las necesidades de una sociedad más urbana y más tecnificada era cada vez más evidente en los países industrializados.
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