DIRECCIÓN CLÍNICA

DIRECCIÓN CLÍNICA

INTRODUCCIÓN

En el presente trabajo tiene a bien analizar la Dirección Clínica, desde un estudio descriptivo y bajo la perspectiva de Luis Rodríguez Manzanera, como una verdadera escuela que tiene por objeto exponer de manera clara lo que debe ser una criminología integral tomando en cuenta todos los aspectos y conocimientos criminológicos para ser aplicados a los individuos en casos concretos, es decir, para el estudio del sujeto, aportando los datos para hacer un dictamen que comprenda diagnostico, pronostico y tratamiento; dando respuesta a la crimino-génesis y la crimino-dinámica.

La criminología clínica analiza la conducta del delincuente, analiza los rasgos físicos tanto externos como internos prevé si volverá a cometer o no el delito, en resumen es la parte fundamental del análisis delictivo para llegar al porque de la actuación del sujeto.

Como segundo objetivo del presente trabajo y no menos importante, es la necesidad de incrementar la nutrición intelectual proporcionada por el Dr. Marco Antonio Chimely López, quien en la materia de Política Criminológica en el marco de un Estado Constitucional, nos ha expuesto de manera clara las direcciones y escuelas criminológicas, captando mi atención en especial la criminología clínica de Benigno Di Tulio, quien la define como la ciencia de las conductas antisociales y criminales basada en la observancia y el análisis profundo de casos individuales, normales, anormales o patológicos.

Estas conductas antisociales que se dan de forma evidente en muestra realidad no pueden ser indiscutible, actualmente nos enfrentamos a los altos índices de criminalidad, de la que los ciudadanos hemos sido víctimas de manera directa o indirectamente. Es importante destacar que en los últimos años la situación criminal en los estados de la republica mexicana, ha incrementado el índice de violencia y delincuencia organizada, debido a la descomposición de las estructuras sociales en México, colocándolo dentro de los primeros lugares a nivel mundial con altos índices de criminalidad.

Como futuro Maestro en Política Criminológica, debemos estudiar nuestra realidad de manera diacrónica y de manera sistemática, reconociendo el pasado, analizando el presente y proyectando estrategias para el futuro, por lo que, en palabras del Dr. Chimely presentare una propuesta criminológica un tanto perversa con fundamento en la criminología clínica, partiendo de la filosofía Marxista, que muchos criticas y pocos entienden.

CONCEPTO

La palabra clínica proviene del griego κλίνη: lecho. En su origen, es la parte de la medicina que enseña a observar, diagnosticar, curar y pronosticar las enfermedades a la cabecera de la cama de los pacientes.

La clínica criminológica tiene por objeto, por analogía con la clínica médica formular una opinión sobre un delincuente, contenido en esta opinión un diagnostico, un pronóstico y eventualmente un tratamiento. La dirección de la Criminología Clínica ha recibido este nombre por la labor común y análoga de un medico que porque tiene por objeto el observar, diagnosticar, pronosticar al paciente.

La clínica criminología es ante todo criminología aplicada, en sus tres niveles de interpretación: el conductual (crimen), el individual (criminal) y el general (criminalidad); la clínica opera básicamente en el nivel individual, toda vez que analiza al sujeto antisocial de panera particular, explicando el nivel de sus conducta partiendo del hecho concreto, para llegar a la conjunción del criminal con su crimen.

La criminología clínica intenta explicar el crimen desde el punto de partida del criminal, y no desde el punto de vista social, sociológico biológico; en alguna ocación se había dicho “que no hay delitos sino delincuentes”, y como agrega Almaraz “no hay delitos ni delincuentes sino hombres”.

La criminología clínica se convirtió en mucho gracias al maestro Di Tullio quien intento con bastante éxito dar una explicación integral a cada caso, considerando al ser humano como una ente Bio-Psico-Social; por lo que concibe a la criminología clínica como la ciencia de conductas antisociales y criminales basada en la observación y el análisis profundo de casos individuales, sean estos normales, anormales o patológicos. Esto implica el conocimiento de las causas en su totalidad y estudiar un desarrollo.

La criminología clínica tiene cuatro principios:

a) El ser humano es una entidad biopsicosocial.

b) Cada ser humano es único y diferente

c) Cada crimen es un suceso singular, e irrepetible.

d) Se llega a un resultado o dictamen del caso.

Con los anteriores principios se puede entender la estructura de la dirección clínica, ya que es importante realizar el estudio del delincuente en su personalidad total; es decir, que no se puede estudiar aisladamente los factores psicológicos, biológicos o sociológicos sino en su totalidad. Por lo que, el tratamiento debe estar basado en el conocimiento de la personalidad del delincuente, reconoce que el modificar la personalidad antisocial es difícil, pero conforme el progreso de las ciencias esto se logrará.

En circunstancias especiales pueden los individuos, llegar a un estado de alteración, puesto que tenemos una tendencia particular al desarrollo y a diversos procesos de desintegración de la personalidad, con las consiguientes perturbaciones graves en su conducta. De acuerdo con ello el profesor Benito Almilcar Fleita, se permite definir la criminología como la ciencia multidisciplinaria que estudia el delito y el delincuente, como la conducta humana desviada tanto de los casos en forma individual como de los fenómenos de masa, a fin de determinar y explicar la génesis del fenómeno, prevenirlos y aplicarle un tratamiento personalizado, procurando su reinserción a la sociedad.

Al hablar de una criminología clínica o clínica criminológica, el profesor Benito Almilcar Fleita, hace referencia a que su estudio es interdisciplinario, puesto que trata de abarcar al ser humano en todas sus dimensiones apoyándose en ciencias tales como la medicina, psiquiatría, psicología, antropología, sociología, etc., a fin de conocer del caso desde distintas ópticas, llegar a la formulación de sus hipótesis como la criminogénesis y crininodinámica de la conducta desviada y aplicar los remedios o tratamientos necesarios en el estudio del delito y del delincuente.

Esta escuela o dirección clínica no trata de explicar o establecer el grado de responsabilidad del delincuente, sino de fijar el grado de temibilidad según el peligro que pueda resultar en su convivencia en la sociedad.

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