El Jardin De Infantes

EL JARDIN DE INFANTES COMO ESPACIO DE RELACIONES EDUCATIVAS.

Los niños a la edad de 3 a 6 años (edad de preescolar) el niño empieza a tener contacto fuera de la familia sus capacidades motrices, perceptivas, comunicativas, comprensivas e intelectivas se desarrollan más de lo que en la familia ha aprendido a hacerlo. En el jardín o preescolar el niño contiene y hace accesible nuevos campos de la experiencia, también la escuela es tranquilizadora pues aunque desconoce lo que vivirá la experiencia de padres hermanos o demás niños que ya lo han vivido esta experiencia le dan una visión de lo que vivirá y esto determinará la disponibilidad o rechazo al intercambio social.

En la escuela se encuentra una variedad de partners a quienes se les ofrece una representación de sí mismos, asumen y experimentan actitudes nuevas, a quienes evaluar su conducta tomando en cuenta el contexto.

Con la observación que se haga de los niños en cuanto a lo que hace, dice, sus movimientos, la actitud se construye la situación del niño. Los niños que se desarrollan en un contexto ampliado toman iniciativas, propuestas y ocupan un propio espacio. Mientras los que se desarrollan en un contexto restringido tienen dificultades ligadas con un problema de gestión de las personas con las que tiene contacto pues en muchos casos exigen habilidades gestuales, verbales que el niño aun no tiene maduras y no puede hacer uso de ellas.

El ambiente educativo que viva el niño debe ser novedoso y variado, esto estimula la participación del niño, multiplican sus posibilidades de acción exige estrategias de selección y de control de mensajes.

La capacidad de comunicación tanto del maestro como el niño deben estar desarrolladas y sobre todo al comunicarse con los niños se debe considerar el modo de ser y la aptitud relacional de quien emite o recibe el mensaje.

ACTUAR ENTRE LOS OTROS, ACTUAR CON LOS OTROS.

El niño observa su entorno (situación) y recaba todos los elementos que están dentro de ella, asume una posición y vincula su relación con otros niños. Existen niños que tienen problemas al relacionarse con los demás y permanecen aislados, en este caso deben considerar que aspectos particulares del niño influyen en su actuar y de relacionarse. Es útil observar que es lo que el niño busca dentro de la situación y darle los elementos de seguridad pues por su corta edad no permite significativos niveles de intercambio social. El niño todavía está ligado en sus percepciones a una perspectiva en la que falta el sentido del otro y de la reciprocidad, pero quien está con ellos sabe que sus interacciones, intercambios y relaciones es amplia y diversificada. Existen grandes diferencias entre el niño que actúa y el que interactúa (interactuar implica una secuencia orientada de acciones, una percepción compartida, un objetivo subjetivo) actuar e interactuar son puntos de apoyo en la función del jardín de infantes y funciona como espacio de relaciones educativas.

La disponibilidad del educador y la relación que mantenga con el infante pueden ofrecer al niño mejores condiciones para una mejor y adecuada presentación de sí o para construir secuencias significativas de acciones dirigidas a los otros o idóneas para la obtención de respuestas congruentes para definir la situación. La posibilidad de expresar el Si en la comunicación con los otros esta favorecida por el uso adecuado de las habilidades verbales y no verbales.

A esta edad se presenta un proceso de identificación que implica una reconstrucción del Si que supera creativa y activamente cada esquema incorporativo, rígido o duplicativo.

INTERACCIONES ADECUADAS Y DISTORCIONADAS.

En el campo de la comunicación, el lenguaje como capacidad en el sentido de acceder y de expresarse en el área de los mensajes es un integrador y un indicador de las funciones de personalidad, un retraso evolutivo es acompañado por carencias de lenguajes, habilidades comunicativas que limitan la comunicatividad

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