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ENSAYO

EL CICLO DE LA PRODUCCIÓN DEL CONOCIMIENTO Y SU VÍNCULO CON EL ÁMBITO EDUCATIVO

Regla de oro en dirección:

Dirige a los demás como te gustaría que te dirigieran a ti.

(Brian Tracy)

En las escuelas del sistema educativo escolar en México está ocurriendo una transformación institucional importante, esto debido a que se generó una necesidad de búsqueda de mejores estrategias para aumentar la calidad y eficiencia de los centros educativos. La gestión del conocimiento constituye uno de los elementos centrales para lograr esta transformación a la sociedad del conocimiento.

La gestión del conocimiento constituye un factor determinante para reproducir y, para nivelar las diferencias e inequidades entre las escuelas, entre aquellas que logren incorporar procesos y tecnologías de gestión del conocimiento y las que no lo hagan. Dentro de la sociedad del conocimiento es muy valorado el aprendizaje en los diversos ámbitos que conforman la estructura escolar.

En la dinámica de la emergente llamada sociedad del conocimiento, los valores y prácticas de creatividad e innovación desempeñarán un papel importante aunque solo sea por su capacidad de poner en tela de juicio los modelos existentes para responder mejor a las nuevas demandas de la sociedad.

Tal como cita Carlos Ruiz Bolivar, con la denominación de sociedad del conocimiento se quiere reconocer, en esta época, la importancia de desarrollar la habilidad de poder procesar información, integrarla significativamente a la estructura previa de conocimiento a fin de generar nueva información y resolver problemas de diferentes naturalezas.

El aprendizaje para la vida social y las competencias profesionales dejan de ser el patrimonio casi exclusivo del entorno escolar, y las escuelas se ven obligadas a transformarse de organizaciones que enseñan a organizaciones que aprenden en y desde problemas y proyectos situados en la vida social y económica.

La gestión del conocimiento busca poner a funcionar todos los medios que estén a su alcance para conseguir información y conocimiento y con eso poder crear una adecuada implementación del aprendizaje.

Hoy a los centros educativos se les exige que el aprendizaje de los alumnos sea para la vida, que sean formados con las nuevas tendencias educativas, tecnológicas y económicas, con procesos que sean de gran utilidad para las etapas de la vida.

Se exige formar en valores de colaboración, solidaridad, tolerancia, aceptación y convivencia para así integrarse adecuadamente a la sociedad del conocimiento.

Hoy se aprende con otros y de otros, se aprende en grupos de gran diversidad en edad, sexo, experiencia y cultura, en contextos reales y virtuales, en comunidades de práctica. Con esto las escuelas se tienen que replantear su trabajo como centro y el trabajo de los docentes a su cargo. “Una educación que garantice el conocimiento pertinente, desvelando el contexto, lo global lo multidimensional y la interacción compleja, propiciando una inteligencia general apta para comprender el contexto, lo global, lo multidimensional y la interacción compleja de los elementos” (Morín 1999)

En nuestro país se presenta un cambio radical en la educación, para ello fue necesaria la articulación de la educación básica en sus tres niveles y una transformación en cuanto a la metodología, centrada en un modelo educativo basado en competencias.

El centro educativo se debe actualizar como organizaciones que aprenden o se quedan obsoletas de la sociedad del conocimiento, de igual manera los docentes requieren de dinámicas de cambio y pasan de ser los que enseñan a ser los que aprenden, de enseñar individualmente a aprender de forma colaborativa conducen la construcción de aprendizajes situados, significativos y reflexivos, o vivirán

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