CASO #1: SHANGHAI JC MANDARIN

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NEGOCIOS 1

CASO #1: SHANGHAI JC MANDARIN

Integrantes:

Camile Barrera Linke

Esteban Jáuregui Aravena

Javiera Monsalve Menares

Moisés Sánchez Vásquez

Darlyn Yucra Rojas

Profesor:

Erich Spencer

Santiago, 21 de marzo de 2019.

RESUMEN EJECUTIVO

El hotel Shanghai JC Mandarin que ha estado en funcionamiento desde 1991, se ha posicionado en la industria hotelera en la categoría menor de 5 estrellas (considerando que existen dos categorías de 5 estrellas, mayor y menor). Se enfoca principalmente, en atender a viajeros de negocios, otorgando un servicio de alta categoría, a un precio menor que el de un hotel mayor de 5 estrellas.

Sus competidores son los hoteles de 5 estrellas, de categoría menor y mayor. Con respecto  a estos últimos, en su mayoría están respaldados por grandes marcas internacionales, lo que provoca que tengan un mayor reconocimiento por clientes occidentales, a diferencia de JC Mandarin, el cual tiene una gran proporción de clientes orientales.

La actual estrategia de JC Mandarin “es ser un jugador de primer nivel en el reino menor de cinco estrellas, con un servicio excelente y una clientela mayoritariamente asiática”(Gamble, Rogers, & Southgate, 2005)

De acuerdo a John D. Daniels, Lee H. Radebaugh, Daniel P. Sullivan (2018) “poner en práctica la estrategia seleccionada, presenta la difícil tarea de integrar los esfuerzos de muchas personas, equipos, grupos y unidades diferentes en un todo que funcione sin problemas.”

Sin embargo, diversos cambios de índole económicos, tecnológicos y sociales han tenido un impacto en la industria hotelera, que los ha  llevado como organización, a cuestionarse si, ¿Podrá su estrategia actual seguir funcionando a largo plazo? ¿Cómo deben responder frente a los cambios económicos, tecnológicos y sociales?

Por lo anterior, se plantea el análisis pestel como forma de identificar los principales factores externos que inciden en la industria hotelera y que podrían tener un impacto en su actual estrategia.

Actualmente un gran porcentaje del sueldo de los trabajadores del hotel es variable y depende del desempeño, lo cual es fuente de conflicto, considerando la forma cómo el trabajo había sido tradicionalmente percibido en la cultura china. Así, buenos trabajadores prefieren empleos donde recibirán un salario fijo mayor, y por ende, JC Mandarin termina contratando personal menos cualificado, teniendo que gastar más en capacitaciones (para mantener la calidad del servicio que siga permitiendo al hotel ser una opción atractiva de la ciudad) pero, una vez capacitados terminan generalmente cambiándose a otras industrias.

ANÁLISIS PESTEL

Político y Legal: Durante el régimen de Mao Zedong, el Partido Comunista tenía el control de todos los trabajadores, a quienes les garantizaba que tendrían empleo de por vida, de acuerdo a las políticas del sistema Iron Rice Bowl. Esto cambió ligeramente en los años 80, gracias a las reformas de privatización impulsadas por Deng Xiaoping, sin embargo, el proceso de adaptación ha sido muy lento, lo cual se refleja en las leyes laborales que operan en el año 2005, las que apuntan a la igualdad y estandarización de un mismo trabajo, al prohibir, por ejemplo, el pago de propinas; buscando así garantizar que cada trabajador pudiera tener un empleo de por vida, y evitando, por ende, los despidos, independiente del motivo, así, los trabajadores son capaces de negociar salarios mayores y mejores beneficios. Esto queda reflejado en el hotel, donde a la mayoría de los trabajadores se contratan anualmente y, a menos que hayan cometido tres faltas que ameriten el despido,  se les renovaba el contrato al pasar el año, incluso durante los períodos de crisis.

Económico: La economía en China ha crecido entre un 8% y 10% durante el último tiempo. Esto, sumado al surgimiento de aerolíneas tipo “low-cost”, han  impactado positivamente a la industria hotelera del país: aumentando la tasa de ocupación de habitaciones y permitiendo que aparezcan nuevos hoteles. Sin embargo, las personas que vuelan bajo esta nueva modalidad tienden a alojar en hoteles de una categoría más económica.

Social: En Shanghai las relaciones suelen estar basadas en una filosofía colaborativa, lo cual explica que en el rubro hotelero, los sueldos de una misma categoría sean equitativos y fijos y que se den buenas relaciones entre los competidores. Además, los viajantes orientales, eligen hoteles basándose en sus estrellas y el precio que cobran, a diferencia de los occidentales, quienes lo hacen según las marcas, a las que asocian con una determinada calidad. Finalmente, existe una percepción negativa de la industria hotelera, lo que determina en cierta forma, las altas tasas de rotación, dado que los empleados sólo ven este trabajo como algo temporal, y tan pronto como adquieren nuevos conocimientos y experiencia, se mudan a otras industrias que consideran más atractivas.

Tecnológico: Se espera que las nuevas tecnologías tengan un alto impacto en la demanda del hotel, mayoritariamente en potenciales clientes internacionales, esto debido a una mayor facilidad en la obtención de información. Lo que facilita una comparación de hoteles mucho más rápida y eficiente. Esto incrementa “la rivalidad” porque los visitantes estarán más informados de todas las alternativas, lo que implica que, los mejores hoteles en calidad y precio, verán incrementados sus clientes, mientras que los peor posicionados deberán buscar formas para no perderlos.

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