CASO PRACTICO Nº1: GASOLINERAS ‘LOW COST’

CASO PRACTICO Nº1: GASOLINERAS ‘LOW COST’

1.- ¿Consideras que es correcto el enfoque de las gasolineras sin personal teniendo en cuenta la orientación al cliente?

Con el precio del barril de petróleo rozando máximos históricos y acumulando varias semanas de subidas, es de fácil comprensión que proliferen las gasolineras low cost y que están teniendo tanto éxito. La crisis que estamos padeciendo es la que tiene la gran parte de culpa, ya que ha provocado una caída precipitada del consumo de combustible, pero no es la única razón de su culpabilidad ya que hay que sumarle el factor de las gasolineras low cost o marca blanca así como también la aparición de las cooperativas que sirven carburantes más baratos.

La tendencia que sigue el sector es clara se basa en nuevos operadores, precios más competitivos y desaparición de algunas de las tradicionales gasolineras  ya que con esta tendencia el cliente (consumidor) va a salir ganando con estas condiciones nuevas pero todo esto nos lleva a la destrucción de empleo y del tejido empresarial como tal, pero esto va a ser una solución momentánea, porque implica caídas de precio, pero al final los precios volverán a repuntar porque lo que se quiere es destrozar los competidores posibles.

Este tipo de mercado que ofrecen las gasolineras low cost tiene más desventajas que ventajas, pero sino fijamos en la orientación del cliente influyen otros factores de carácter personal y también como no un de los más importantes del nivel económica de cada persona en función de la situación en que se encuentre, como puede ser que un cliente su nivel adquisitivo medio –bajo no sea muy boyante entonces lo más probable es que se decante por las low cost pero también lo que puede suceder es que como la poca seguridad en cuanto al servicio es muy justa como puede ser todo tipo de reclamaciones del servicio que debe de recibir como puede ser, devolución del dinero sobrante al repostar o cualquier problemas de pudiera surgir en las instalaciones al no haber ningún tipo de personal y al final este cliente no le compense la diferencia de dinero respecto a las otras gasolineras más caras debido a los posible problemas que haya tenido.

2.- Existen dos formas básicas de mejorar la competitividad de una empresa, argumenta si en el caso expuesto nos encontramos con una mejora continua (kaizen) o con una innovación.

Respecto al caso expuesto y bajo mi punto de vista nos encontramos más en un caso de innovación que de mejora continua (kaizen).

Es más como novedad del método utilizado de low cost dentro del mercado que el de mejora continua y con ello el de mantener una calidad total del producto o servicio que pueden ofrecer la gasolineras low cost.

Ser una empresa genuinamente low cost es una decisión estratégica, la cual cosa implica la transformación en profundidad de toda su cadena de valor, para poder adaptar a los compromisos derivados de la estrategia. Con esto se asegura la sostenibilidad económica y social del modelo a largo plazo.

Su ventaja competitiva consiste en tener un nivel de costes mucho más bajo que el de la competencia, enfocándose hacia un mercado configurado por personas con escaso poder adquisitivo que no pueden permitirse repostar en las de mayor coste, y por personas que aun teniendo un poder adquisitivo aceptable, les puede atraer la atención personalizada que puedan recibir por parte del personal de las gasolineras tradicionales.

Los productos o servicios de low cost básicamente no pueden dar una buena calidad porque los recursos empleados son más escasos debido a la reducción del nivel de costes.

Low cost = low quality

La competitividad es mucho más compleja que una bajada de salarios. No se trata de trabajar 12 horas, sino de que lo que trabajes produzca lo suficiente para pagar tu sueldo, tus impuestos y tu pensión. Si no es así, mal vamos, por muy bonito que sea ese puesto de trabajo.

Tenemos que ser competitivos, si queremos mantener nuestro nivel de vida y nuestro “estado de bienestar”. Seguramente este sea más bajo del que imaginábamos, y vivíamos, pero seguramente también porque la burbuja no nos dejaba ver más allá.

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