¿Cómo educan los maestros en Guatemala?

¿Cómo educan los maestros en Guatemala?

La educación es un tema que todos los gobernantes de turno debieran priorizar, para que esta, en primer lugar exista, y, en segundo lugar, sea de calidad.

La educación empieza en el hogar, pero en la sociedad moderna el hogar y la familia han pasado a segundo plano, delegándose la tarea de educar a niñeras y maestros. En años anteriores se comenzaba estudiando en párvulos. Es una sociedad tan innovadora, y no porque sea su naturaleza, sino porque es una necesidad: muchos no tienen el tiempo para atender a sus hijos porque deben trabajar para satisfacer sus necesidades básicas.

Los niños aprenden a leer a muy temprana edad, lo cual no es malo, pero también han aprendido a utilizar y adorar la tecnología, porque los padres para librarse de atenderlos les han dado el celular y otros implementos tecnológicos para su diversión; esto sí es malo, pero por la forma equívoca como se han utilizado.

En preprimaria se aprenden los números, las letras y lo más importante, a relacionarse con los demás; en primaria, se aprende a leer, a sumar y restar, geografía y ciencias naturales entre tantas cosas. En los básicos y el diversificado se aprende de la historia y cultura del país y en algunos casos, un oficio, ya sea maestro, contador, entre otros. Lo que es lamentable, y da mucha pena es ver personalidades que no saben leer bien, otras que no saben escribir, y dejemos las personalidades, los profesionales universitarios, hay muchos que tampoco lo hacen correctamente. Pero no es culpa únicamente de ellos, sino también de la tecnología: escribir en un procesador de texto que corrige casi cualquier error ortográfico, mas no de redacción.

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Los padres han olvidado que también son maestros, que también deben educar a sus hijos, y han olvidado, quizás por ignorancia o falta de razonamiento, o quizás simplemente por ver complicada la posibilidad de que sus hijos obtengan un trabajo, si bien, ya no respetado, al menos necesario; aunque esto signifique que no estén calificados para educar a quienes guiaran a Guatemala en los caminos del futuro.

Enseñar a alguien es una de las tareas que a la larga conlleva mayor responsabilidad, es una tarea monumental que requiere paciencia, dedicación y sobretodo vocación, una tarea que requiere mayor entrega de la que jamás podrá ser remunerada y por ende, la persona que asuma esta tarea debe de ser la mejor preparada, y ser consciente a su vez de la necesidad de actualizarse constantemente.

Los docentes educan conforme lo que ellos saben y en  la forma en que se preparan para dar una clase, en varios casos los maestros a nivel primario no se interesan en prepararse para enseñar, esto afecta a los niños y niñas a que no aprendan de una forma adecuada  y que les haga falta ciertos contenidos porque existen casos en que los maestros no se preocupan para dar todos los contenidos necesarios para cada grado de escolaridad.

En la actualidad es frecuente percibir a los estudiantes la falta la motivación y existen docentes que no  motivan a los estudiantes.

Los docentes perciben que su trabajo sólo consiste en enseñar y no motivar, que durante toda la clase únicamente se debe transmitir el contenido del curso. Éstos carecen  de conocimiento y aptitud de las técnicas de incentivación MOTIVACIONAL, se interesan más en la transmisión de temas  de las asignaturas, pero se sabe que los estudiantes no motivados no logran el aprendizaje.

Algunos maestros no manejan la comunicación oral de una forma adecuada, ya que dan su clase con un lenguaje pesado, estático y difícil de entender, es por ello  los estudiantes se les convierte un obstáculo entender y aprender,

Como debe de ser un maestro ideal.

Un maestro se distingue por su liderazgo, por su autoestima, por su vocación, por su espíritu indómito, por su compromiso con la educación y con el país.

Un maestro se distingue por enseñar la verdad y por preparar a sus alumnos para la vida.

Un maestro se distingue por su actitud positiva, porque enseña con el ejemplo.

Un maestro se distingue por su qué  hacer ético, moral y cívico; porque mediante su cátedra ciudadana señala la corrupción, la impunidad y el desorden que padece nuestro país; porque en su práctica pedagógica denuncia la falta de equidad, justicia y de respeto a los derechos humanos.

Un maestro se distingue por su formación profesional, porque está consciente de que para ser competitivo se debe estar actualizado en lo relacionado a las innovaciones didácticas, en la transformación curricular y en el rol que debe jugar en los nuevos tiempos..

Un maestro se distingue por su visión de país y por su identidad nacional, porque promueve la cultura y la educación, el trabajo en equipo, la solidaridad, el respeto, el consenso y la tolerancia.

Un maestro se distingue porque es el promotor de la nueva civilización, porque pone en el centro de su quehacer docente la praxis de los valores humanos.

EL SISTEMA EDUCATIVO EN GUATEMALA

Guatemala ha tenido históricamente un nivel muy desfavorable en el campo de la educación. El nivel de escolaridad en Guatemala es sumamente bajo, el Instituto Nacional de Estadística (INE) estima que el promedio es de solo 2.3 años. Incluso menor en los departamentos mayoritariamente indígenas (1.3 años).Las oportunidades de acceso y permanencia en el sistema educativo no se hayan al alcance de la mayoría de la población guatemalteca. Desigualdades económicas y sociales y otros factores políticos, lingüísticos y geográficos influyen en el acceso de niños a la educación. Esta deficiencia es muy preocupante si se toma en cuenta que la educación no es solo un factor de crecimiento económico, sino también un ingrediente fundamental para el desarrollo social, incluída la formación de buenos ciudadanos. La población guatemalteca ascendía a 10.8 millones de habitantes en 1996. Como muchos países en vías de desarrollo, la población de Guatemala es una población joven. La población de menos de 14 años asciende al 44.1% del total y los de menos de 25 años representan el 64.7% de la población (INE, 1998). Los niños y jóvenes de hoy pertenecen a una generación de guatemaltecos que han nacido y crecido en momentos de grandes cambios. Esto junto con la presente transición democrática por la que atraviesa el país y su integración en el mercado internacional, hacen de la educación una necesidad básica para el desarrollo y adaptación de los guatemaltecos a esta nueva etapa de desarrollo, democracia y paz. Los Acuerdos de paz y el Plan Nacional de Desarrollo 1996-2000 plantean la necesidad de reducir el déficit de cobertura, especialmente en los niveles de preprimaria y primaria, con énfasis en el área rural y en la educación de las niñas, así como elevar el nivel de alfabetización y mejorar la calidad educativa. Por otro lado, se requiere un esfuerzo más amplio de reforma para que la educación responda a la diversidad cultural y lingüística de Guatemala, reconociendo y fortaleciendo la identidad cultural indígena, los valores y sistemas educativos mayas y de los otros pueblos indígenas.

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