Necesidades educativas especiales para capacidades diferentes. Reto y asignatura pendiente para el sistema Educativo

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Licenciatura  en Pedagogía online

Asignatura: Inclusión Educativa y

Atención a la Diversidad

Entregable 1: Ensayo

Necesidades educativas especiales para capacidades diferentes. Reto y asignatura pendiente para el sistema Educativo

Nombre del Estudiante: Vanessa María Ceballos Rolón

Nombre del Docente: Flavia Alejandra Muñoz Gutiérrez

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Fecha: 26 de marzo de 2022

Unitec Campus en línea

Necesidades educativas especiales para capacidades diferentes. Reto y asignatura pendiente para el sistema Educativo

Partiendo de la premisa de que todos somos diferentes, podríamos argumentar que todos tenemos necesidades educativas especiales, sin embargo es importante clarificar que aunque lo anterior es cierto y en los últimos tiempos se han ido tomando en cuenta cada vez más los canales y estilos de aprendizaje particulares, en esta ocasión haremos referencia a los alumnos con necesidades educativas especiales (NEE) como “aquellos alumnos y alumnas que, en comparación con sus compañeros de grupo, tiene dificultades para el aprendizaje de los contenidos establecidos en el currículo, por lo cual requiere que se incorporen a su proceso educativo mayores recursos y/o recursos diferentes para que logre los fines y objetivos educativos”. Este concepto se establece en México luego de la proclamación de los “Principios, política y práctica para las necesidades educativas especiales” derivada de la conferencia mundial de la UNESCO llevada a cabo en Salamanca (UNESCO, Junio 1994).

Según el concepto antes referido, el hecho de que las personas presenten desventajas o dificultades con respecto a sus pares, nos habla de capacidades diferentes, que en muchos de los casos pueden denominarse como discapacidades. Contextualizando es importante considerar que las personas con discapacidad son “aquellas que tienen disminución o carencia en alguna o algunas de sus funciones físicas, mentales, intelectuales o sensoriales que en interacción con diversas barreras pueden obstaculizar su interacción plena en la sociedad en igualdad de condiciones” (Muñoz, A. 2021), es decir existen diferentes tipos de NEE como son: Discapacidad auditiva,  visual, motora e intelectual. Es relevante la acotación de que estas discapacidades y necesidades especiales pueden ser temporales (por un tiempo determinado) o permanentes, es decir una condición de vida que no desaparecerá.

Luego de haber clarificado estos términos, me permito poner sobre la mesa el hecho de que a pesar de los discursos y las buenas intenciones que pueda haber, es una realidad que en nuestro país no existe una repuesta clara y eficaz a las NEE, pues a pesar de que se habla de una inclusión educativa con acceso universal y  justicia educativa, se ha logrado quizás la integración, más no la inclusión, ya que esta última refiere una participación real, que busque la equidad y que requiere por tanto acciones y condiciones que no se han procurado y que debieran ser parte fundamental de las políticas públicas.

Luego de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, del 2008, México se comprometió junto con otros países a reconocer el derecho de las personas con discapacidad a la educación, sobre la base de la igualdad de oportunidades, asegurando un sistema educativo inclusivo; sin embargo, es una realidad que aunque la intención de maestros, maestras, personal directivo, administrativo de apoyo y servicios complementarios, es la mejor, para brindar atención a estos casos, han faltado, planes, programas y presupuesto para que esto sea una realidad y vemos que si bien es cierto que las escuelas están “abiertas” para recibir a todos, no están “preparadas” para darles la atención debida.

Nos encontramos entonces con escuelas que no cuentan con la estructura e infraestructura necesarias, en donde al personal, especialmente a los docentes, se les invita a capacitarse, pero no se le capacita o se les facilita la capacitación, a fin de que cuenten con las herramientas para dar atención a los diferentes tipos de discapacidad; se le pide considerar en su planeación acciones para niños con rezago y NEE, sin soporte u orientación y finalmente se les pide realizar trabajos de gabinete, sin que cuenten con el tiempo, la preparación y los apoyos económicos para hacerlo.

Dado lo anterior debiera motivarnos al análisis y reflexión de que el solo ingreso a la escuela “para todos”, no garantiza la equidad e inclusión y puede incluso generar problemas para un sector especialmente vulnerable, y que en lugar de potenciar su desarrollo les provoque aversión a la escuela, al aprendizaje y a la integración social en condiciones de igualdad; esto último, no quiere decir que yo proponga que la inclusión se dé solamente en ambientes utópicos en los que existan todos los recursos, sin embargo, considero que esta necesidad social se ha tratado muy a la ligera, sin que haya una sistematización que procuré los objetivos planteados en las convenciones y documentos citados.

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