Orientacion Educativa

Como se precisa más adelante, el propósito de la asignatura es propiciar el conocimiento y la reflexión sobre tres grandes campos temáticos relativos a la situación del adolescente y su transición a la vida adulta: la conservación de la salud y la prevención de las enfermedades, en particular de las que se relacionan con las adicciones a sustancias tóxicas; el desarrollo de la sexualidad y su ejercicio responsable y las oportunidades de estudio y de trabajo que permiten al estudiante la realización de sus potencialidades y preferencias.

En relación con estos temas, la asignatura debe, en primer lugar, dar a los estudiantes la oportunidad de obtener información precisa y confiable; en segundo, debe propiciar la reflexión personal y, cuando se requiera, la discusión, en un ambiente respetuoso y tolerante que estimule a los alumnos a expresar libremente sus dudas y opiniones.

El sentido de estas actividades es proporcionar un apoyo al estudiante para que se forme criterios propios y pueda adoptar decisiones maduras en relación con aspectos esenciales de su desarrollo. Este propósito se fortalecerá si el maestro puede establecer una relación de intercambio de ideas y de apoyo mutuo con las madres y los padres de familia.

Organización de la asignatura

El programa indica un temario básico, enunciado en forma general, que el grupo deberá desarrollar durante el curso; sin embargo, el maestro dispondrá de la flexibilidad necesaria para priorizar los temas, matizar su tratamiento y agregar otras cuestiones que considere pertinentes y que correspondan a la orientación de la asignatura. Para tomar estas decisiones el maestro deberá considerar las condiciones y problemas que tienen mayor peso, dada la composición social, cultural, de género y edad de su grupo, las características de la zona en la que se ubica el plantel, así como la dis-posición y las preocupaciones de los padres de familia.

Atendiendo a los propósitos del curso, es conveniente que el maestro diversifique las actividades mediante las que los alumnos puedan obtener información y motivos para la reflexión. Debe evitarse que el curso adquiera una formalización excesiva y por tanto no es adecuado que el maestro actúe como única fuente de información o que se dependa sólo de material escrito, en especial de algún libro de texto.

Para lograr esta diversificación el maestro debe propiciar que, en la medida de sus posibilidades, los alumnos busquen información, la procesen y la discutan en grupo; que realicen visitas y entrevistas programadas, sistematicen esas experiencias y puedan conversar en el grupo con especialistas e informantes seleccionados con un propósito definido. Igualmente se recomienda la utilización del cine y la televisión, así como de la novela, el relato y el teatro, que son relevantes para los temas del curso.

Considerando que una temática importante del curso se relaciona con aspectos médicos y de prevención de las enfermedades, se recomienda al maestro que busque el apoyo de las instituciones de salud que funcionan en la zona, ya sea para obtener información confiable o para lograr la participación directa del personal de dichas instituciones.

En el desarrollo de las actividades, el maestro seleccionará las formas de organización del trabajo del grupo que son más adecuadas en relación con la temática que se esté tratando: con el grupo en su conjunto, con equipos de trabajo o, si ese fuera el caso, dividiendo al grupo por género. Igualmente localizará los casos en que sea útil la intervención del orientador o la comunicación con los padres

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