¿ES EL CONFLICTO SUSCEPTIBLE O IRRECONCILIABLE CON LAS FORMAS DE RESOLUCION?

A lo largo de la historia del hombre, se han tejido teorías, conceptos y elaboraciones alrededor de la guerra, el conflicto, la violencia, la paz; pero solo hasta los años 50 después de la hecatombe de la segunda guerra mundial se empiezan a cobrar importancia, desde entonces numerosos teóricos sociólogos, psicólogos, filósofos y humanistas, empiezan a ser conocidos por sus aportes.

La sociología se ocupa de definir el conflicto desde la sociedad, destacando el papel que éste cumple en las relaciones sociales, políticas y económicas y las formas como se ha transmitido de generación en generación a lo largo de la historia, por su parte la psicología a tribuye la violencia a la “psiquis”, manifestada en pensamientos, emociones y acciones.

También es vital considerar que el origen del conflicto se atribuye en gran parte a la estructura social que ha prevalecido desde tiempos remotos, pues siempre habrá dominantes y dominados unos que tienen el poder y otros que luchan por obtenerlo buscando la igualdad, esta dominancia es irreconciliable ya que como decía Marx, la tenencia de la tierra y de los medios de producción siempre continuara en manos de unos pocos, y eso les permitirá ejercer su poderío sobre las masas.

La violencia parte de la desigualdad que genero clases sociales, sistemas económicos y políticos en favor de unos pocos, de un gobierno en favor de unos pocos lo cual genera de la lucha de los menos favorecidos por conquistar sus derechos, de allí han desencadenado formas de manifestarse como el conflicto armado, la segregación racial, la exclusión, la iniquidad, y la dominación entre otros.

Esto ha conllevado a una disputa entre unos u otros, dos bandos irreconciliables movidos por intereses contrarios, cuyas necesidades, sentimientos, objetivos, conductas, valores y afectos se tornan mutuamente incompatibles.

¿La violencia es la única manera de resolver un conflicto?

La violencia es la forma más burda y primitiva de agresión en donde prima las destrucción sobre cualquier otra alternativa para solucionar nuestras diferencias, en este sentido los conflictos guardan una relación con la violencia porque el uso de la violencia o las reacciones violentas son inevitables a la hora de tratar un conflicto, existe una visión negativa del conflicto, cuando la violencia se ve como necesaria y hasta se justifica para hacer respetar nuestras posiciones.

En los conflictos existen niveles de tensión, dificultad y oposición elevados, esto no quiere decir que los involucrados en los mismos, justifiquen la violencia como mecanismo para superar las tensiones y posiciones opuestas.

Si se asume el conflicto como parte integral de la vida humana y social, se pueden tener dos ópticas una positiva y otra negativa, la negativa no es tan conveniente porque invalida la posibilidad de generar aprendizajes, por su parte la positiva desde la acción creativa y constructiva teniendo en cuenta sus actores, causas e intereses que conducirá a tramitar y a gestionar acuerdos y desacuerdos y a dejar de lado la idea equivoca de que la única forma de mediar un conflicto es por medio de la violencia.

Además se debe considerar que el conflicto tiene una trayectoria histórica, es una experiencia de carácter social, genera oportunidades a través de múltiples formas de expresión y resolución y admite la diferenciación y unicidad; cuando se trata de su transformación se deben tener en cuenta tres elementos básicos que son: las personas, el proceso y el problema, esta triada conforma su estructura y permite su análisis desde los actores, el problema que debe resolverse y la trayectoria que implica su resolución.

En una situación conflictiva no existen límites establecidos de manera definitiva entre el análisis del conflicto y la participación o intervención en su transformación constructiva y pacifica porque no son situaciones secuenciales o consecutivas, en muchos casos los actores primarios y secundarios aparecen involucrados sin previo motivos, por debemos elegir respuestas, actitudes, conductas y acciones individuales o colectivas.La transformación del conflicto es una forma de visualizar y responder al ir y venir de los conflictos sociales como oportunidades que nos da la vida para crear procesos de cambio constructivo que reduzcan la violencia e incrementen la justicia en la interacción directa y en las estructuras sociales, y respondan a los problemas de la vida real en las relaciones humanas.

A través de los años han surgido un número de estrategias de manejo constructivo para la transformación del conflicto en todos los niveles de interacción social,

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