Habilidades blandas

Las habilidades blandas son aquellas que más allá de los conocimientos técnicos permiten interactuar con las personas y se relaciona directamente con el carácter. Estas habilidades no se enseñan si no que son propias de cada individuo. Por lo general se aprecian en el liderazgo, en la forma de trabajar en equipos y en la mejor relación en un ambiente de trabajo. Es por ello que en éstos últimos tiempos han ido tomando protagonismo en las empresas, especialmente en el reclutamiento de personal para altos cargos o también en puestos en los que se relacionen directamente con el cliente, pues el desplante y la manera de desenvolverse son de gran eficacia para el éxito de las grandes compañías.

Las habilidades blandas resultan decisivas en el ambiente laboral, las dificultades a las que se enfrentan diariamente los ejecutivos y profesionales, son las de romper paradigmas, salir de su zona de confort, salirse del concepto de jefe para iniciarse en el de líder. Se ve aquí la importancia de contar con trabajadores que manejen habilidades blandas para contrarrestar estas ideas que poco a poco se vayan perdiendo. 

Los paradigmas sociales y laborales evolucionan como todo, esos cambios son naturales y obedecen a las necesidades del entorno. Antes era común que todo estudiante creyera, que todo lo que necesitaría para trabajar sería dado por la universidad o las escuelas técnicas, y que, con estudiar al máximo y obtener buenos promedios, el éxito estaría prácticamente a la vuelta de la esquina.

Una vez que se ingresa al mercado laboral las reglas cambian y no sólo se considera y evalúa el rendimiento académico, sino también una serie de habilidades adicionales, conocidas como habilidades blandas. Esto sucede porque aparte de los conocimientos que tenga un profesional, sigue teniendo la necesidad de relacionarse con personas para lograr cosas y solucionar problemas estas habilidades suman. Por tanto, aquella persona que parecía destinada al fracaso debido al bajo promedio académico puede tener una mejor posición si tiene las habilidades que el nuevo entorno de competencia requiere.

Esto no quiere decir que el éxito es el resultado de una buena sonrisa y la actitud correcta; es tan errado como decir que el éxito está asegurado sólo en función al desempeño académico. No existe un método para lograr éxito. Quien ha trabajado sus habilidades blandas a lo largo de su vida y además ha adquirido competencias técnicas o académicas altas es más competitivo que alguien que carece de alguna.

En la entrevista laboral no sólo se cruza información entre lo que el candidato dice y lo que está en el currículum, sino también se observa su lenguaje, expresiones corporales, si mira a los ojos cuando habla o en situaciones cómo transmite información frente a preguntas incomodas y la forma desenvolverse, la forma de resolver problemas estas habilidades con lo que se busca para la empresa y si es lo necesario para asumir roles importantes.  En la actualidad son necesarios en una entrevista de selección del personal, pues en el sólo hecho de presentarse y en la forma de expresar sus ideas y responder a las preguntas, él entrevistador puede notar su presencia y si tiene ciertas habilidades como el liderazgo, y esto no debe confundirse con la autoridad.

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