LA ETICA EN EL MARKETING

LA ETICA EN EL MARKETING

1. ¿Cómo define Aristóteles la ética?

Con respecto a la ética Aristóteles propone que todo lo que conduce al hombre a su propio bien y al logro de sus verdaderos fines es una acción buena y todo lo que lo desvía de ese objetivo es una acción mala.

La ética de Aristóteles es una ética de bienes porque él supone que cada vez que el hombre actúa lo hace en búsqueda de un determinado bien. El bien supremo es la felicidad y la felicidad es la sabiduría (el desarrollo de las virtudes, en particular la razón). La ética de Aristóteles establece como punto de partida que el fin último de todo ser humano es la felicidad. Según Aristóteles, para llegar a la felicidad, se debe analizar la naturaleza humana. De esta manera se llega a la conclusión de que cada ser es feliz realizando la actividad que le es propia y natural. Es decir, el hombre es feliz siendo hombre y llevando a cabo actividades propias de los hombres.

2. ¿Cómo es la relación de lo ético con lo económico de acuerdo a la lectura?

Según la lectura referente a la relación de lo ético con lo económico, se destaca la siguiente frase: “el reto consiste en integrar a las decisiones directivas el criterio ético y hacerlo prevalecer sobre lo económico, incluso cuando no sea la opción más rentable a corto plazo”

Existen suficientes razones para justificar que la ética y la economía deben estar relacionadas estrechamente y el empresario debe ser un convencido de que esto es positivo para su gestión, de que no debe considerar solamente los aspectos económicos, sino también los sociales y medioambientales. La ética no puede concebirse como algo externo a la economía sino algo que le imparte ciertas restricciones a la forma de proceder para poder crear valor dentro de una economía. Pero una dura realidad es que en Colombia y muchos otros países todo gira hacia el capitalismo, y es por eso que en la gran mayoría de las empresas su objetivo principal es el que al finalizar un año fiscal todo sea utilidades (ganancias económicas) y por ende las estrategias del marketing siempre buscaran fines económicos y no éticos (aunque habrán pocas excepciones)

Una empresa ética es aquella que se ha ganado el respeto y la confianza de sus empleados, clientes, proveedores, inversores y la comunidad en general, por haber encontrado un equilibrio adecuado entre sus intereses económicos y los intereses de todos aquellos afectados por sus decisiones y acciones.

3. Cuál es el compromiso de la empresa con el ser humano y el medio ambiente frente a lo ético?

En los últimos años se está observando una creciente preocupación por parte de los ciudadanos y de las organizaciones sociales acerca del comportamiento ético de las empresas y nos es para menos cuando vemos aparecer problemas tan graves como el adelgazamiento de la capa de ozono, la deforestación, la desertización, la destrucción de los bosques tropicales, la degradación del aire, del agua y del suelo, la contaminación acústica, nuclear y electromagnética. Las nocivas consecuencias son inevitables: lluvia ácida, efecto invernadero y cambios climáticos, pérdida de la biodiversidad y del equilibrio ecológico... Y lo que es peor, finalmente se traducen en un daño para la salud de los propios seres humanos: cáncer, dolencias respiratorias, mutaciones genéticas, problemas digestivos, estrés, etc. Pero no todo es negativo, ya muchos países, empresas y personas han tomado un poco de consciencia, han sacrificado rentabilidad económica para preservar nuestro planeta. Ya muchos gobiernos multan a las empresas que contaminen el aire, los ríos, castigan a los que deforestan, penalizan la tala de bosques, esperando con estas acciones devolverle algo de lo que le pertenece al planeta. Muchas empresas conscientes están utilizando productos ecológicos fabricados por empresas conscientes y es que no se puede ignorar lo que representa actualmente el rol de las empresas, su operatividad en el entorno, medio ambiente en donde se desenvuelve. Se requiere que realmente se cumpla con la responsabilidad social a la que están obligadas, entre ello preservar el medio ambiente, evitar su contaminación, todo lo que pueda deteriorar con la operatividad de la empresa.

El ser humano como un medio para conseguir otro fin, usualmente económico tampoco es concebible actualmente. Jamás se justificará una acción que, valiéndose de una persona, se lleve a cabo en aras de conseguir otro bien. Si el empresario o director solo utiliza a las personas como un medio para conseguir un fin económico, dejando de lado su responsabilidad por formarlas y velar por su dignidad, está faltando a la ética. Su compromiso debe basarse en fomentar la mejora de la persona a través de su empresa. Todo lo que el ser humano construya deberá de considerar al hombre como fin último y no como medio.

El comportamiento ético y responsable frente a las personas y al medio ambiente siempre es beneficioso ya que aumenta la credibilidad del negocio y mejora la percepción del Cliente.

“El ser humano en el planeta tierra debe: vivir, convivir y no sobrevivir”

4. ¿Qué se entiende por dignidad humana, según los grandes filósofos –Aristóteles, Kant?

La expresión “Dignidad Humana” hace referencia al valor esencial e intransferible de todo individuo, independientemente de su condición social o económica, raza, religión, edad, sexo, raza, color, entusiasmos, expresión etc.

Kant, tal vez el más preclaro exponente de la ilustración filosófica escribe: «la humanidad misma es una dignidad, porque el hombre no puede ser tratado por ningún hombre (ni por otro, ni por sí mismo) como un simple medio o instrumento, sino siempre a la vez, como un fin, y en ello estriba precisamente su dignidad».

Kant defiende que, al margen del reino de "las cosas que tienen precio", tenemos que pensar el de las que "poseen una dignidad". Dignidad sería lo que caracteriza a aquello que se eleva por encima de todo precio, cuyo valor no es relativo, sino absoluto; lo que no puede servir de medio para ningún fin externo a sí mismo. Según Kant, sólo los hombres, y sólo precisamente en la medida de que sean sujetos racionales libres, poseen dignidad.

Por otro, para Aristóteles “la dignidad no consiste en nuestros honores sino en el reconocimiento de merecer lo que tenemos."

La dignidad o excelencia del ser humano no se encuentra en su inmortalidad ni en su trascendencia (es decir, en su pertenencia a un mundo supraterrenal), sino en su puesto dentro de la escala de los seres vivos. Según Aristóteles el mundo natural está organizado jerárquicamente en 4 reinos, que de inferior a

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