Cerveza obscura

Cerveza obscura

Cabello largo, labios y uñas pintadas de negro; ojos delineados, botas con plataformas de ocho centímetros y chamarra de cuero bajo un sol despiadado que sube el termómetro a los 30° centígrados, mientras lo saturado del esmog lo hace aumentar unos cuantos grados más. Pareciera ser que se trata de un desquiciado o enfermo mental. La verdad es que su única enfermedad es la adicción a la música. Heavy Metal, Dark, Goth... A simple vista, y oído, no hay mucha diferencia.

Cientos, tal vez miles, de tipos con una descripción idéntica o muy parecida a la de las líneas anteriores se congregan cada sábado en el nacionalmente conocido Tianguis Cultural del Chopo de la colonia Buenavista, en la delegación Cuauhtémoc. Llevan décadas, generaciones, haciéndolo. Los motivos son distintos: negocios, compras, socialización, ocio, morbo. Todos ellos bajo una finalidad mayor e incluyente: la música.

La cultura de masas en México tiene al 90% de la sociedad escuchando el mismo tipo de música: La que dictan las estaciones radiofónicas, la que elijen las casas productoras de élite. Una pieza fundamental en el funcionamiento de los bares y centros nocturnos es el tipo de música que en ellos se toca. Es la bandera con la que atraen a sus clientes. Si el 90% de la población mexicana escucha canciones comerciales, es de esperarse que un porcentaje parecido de centros nocturnos estén dirigidos a un público mainstream. La llamada “ gente normal” de la sociedad.

Cada persona aficionada a la música underground aborrece o aparenta aborrecer los ritmos que las estaciones de radio tocan al aire. Parece odiar la música comercial y en general todo lo que tenga que ver con la cultura masificada. Entonces ¿dónde se divierten este tipo de personas? No parece haber “antros” o bares dirigidos a sus gustos. Y la verdad es que la afición a la juerga y al alcohol de muchos de estos individuos parece estar al nivel del de su gusto por la música.

Afortunadamente, para ellos, existe una cantidad considerable de sitios de esparcimiento para adultos con tendencia underground en la Ciudad de México. La mayoría de estos lugares se encuentran en zonas céntricas de la ciudad. Más específicamente, en la delegación Cuauhtémoc.

Si una persona común siente curiosidad al observar a tipos con un aspecto sacado directamente de las películas de Tim Burton, o que aparentan haber dejado su motocicleta chopper unas cuadras atrás, ¿qué sentimiento tendrán al ver a cientos de personas con la misma imagen? Ebrios, cantando o bailando música “estruendosa” con tintes “diabólicos”. Suena un poco terrorífico y repugnante. Lo cierto es que en un bar común sucede exactamente lo mismo.

Bar “El español”

Ubicado a una cuadra del Tianguis Cultural del Chopo, sobre la calle Aldama a unos pasos del Eje 1 norte, justo atrás de las oficinas centrales del PRI, se encuentra un restaurante (Benidorm) que entre semana funciona como punto de reunión y alimentación para trabajadores de la colonia Buenavista. Un lugar amplio, decorado, con un estacionamiento con espacio para veinte vehículos. Seguramente un lindo sitio para comer. El restaurante es famoso y no precisamente por su ambiente o calidad culinaria.

Cada sábado, a punto

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